Boluarte asegura que no habrá impunidad en las muertes de manifestantes

EFE

Lima.- La presidenta de Perú, Dina Boluarte, aseguró este jueves que la Fiscalía y el Poder Judicial investigarán las muertes de manifestantes en las protestas desatadas tras el fallido autogolpe de su predecesor, Pedro Castillo, y aseguró que no permitirá que haya impunidad

"No vamos a permitir impunidad, que se investigue, se individualicen, los hechos y la Fiscalía y el Poder Judicial estarán asumiendo sus roles como corresponde", dijo en rueda de prensa con la Asociación de la Prensa Extranjera en Perú (APEP).

Agregó que "no se va a quedar nada impune", luego de que en dichas manifestaciones han muerto 28 personas, muchas de ellas por disparos y, en su represión, han participado las Fuerzas Armadas en apoyo de la Policía Nacional de Perú (PNP) tras la declaración del estado de emergencia por el gobierno de Boluarte.

"Cuando asumí el cargo como presidenta en esa asunción constitucional, en ese mandato constitucional, luego de un intento de golpe de Estado del expresidente Pedro Castillo. No pensé que iba a haber esta tremenda violencia a nivel nacional", sostuvo.

En este sentido, dijo que tenían que "tomar medidas necesarias para salvaguardar la vida y tranquilidad de los 33 millones de peruanos".

"En el Consejo de Ministros no fue fácil declarar el estado de emergencia nacional, la Policía y el Ejército salieron para defender la vida y tranquilidad de los 33 millones de peruanos", sostuvo.

Luego Boluarte dijo que los fallecidos le duelen "en el alma", pero subrayó que la Fiscalía tiene "todas las facilidades" y "dentro de su autonomía están realizando su trabajo".

"De iniciativa propia este ejecutivo invitó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que viniese al Perú y pudiera hacer su trabajo de investigación", recordó.

Al respecto, la mandataria afirmó que en enero volverá la comitiva de la CIDH "para sus conclusiones".

Finalmente, hizo hincapié en que su Gobierno no ha generado la violencia y subrayó que el suyo será un ejecutivo "dialogante y tolerante", pero que ha llegado al poder tras un periodo de "una polarización tremenda".