Tormenta de arena azota a Medio Oriente y deja apocalípticas postales

Foto: EFE

Bagdad.- Los estragos causados por una tormenta de arena este lunes en Kuwait, Irak y Arabia Saudita, además de provocar el cierre de aeropuertos, afectaron alrededor de mil personas por problemas respiratorios.

Desde el domingo, el gobierno iraquí había anunciado la suspensión de vuelos en los aeropuertos, así como de todas las actividades no esenciales para hoy, por el temporal que azota a la región desde hace unas semanas y que ha provocado la hospitalización de miles de personas.

El Ministerio de Transporte anunció la suspensión de los trabajos en los aeropuertos debido a "la falta de visibilidad", puesto que solo se alcanzará a ver a unos cien metros de distancia e imposibilitará la maniobra de los aviones, según un comunicado.

La secretaría general del Consejo de Ministros anunció en otro comunicado la suspensión de las actividades del sector público, que emplea a alrededor del 60 % de la población activa del país árabe.

Quedan exentas de estas medidas todas las instituciones relacionadas con la sanidad y la seguridad, según la nota.

El portavoz de la Defensa Civil, Yaudat Abdelrahim, dijo, en declaraciones a la agencia de noticias estatal iraquí INA, que el departamento aumentó su dispositivo de ambulancias en Bagdad y en otras provincias, que han desplegado en "lugares públicos y plazas concurridas para brindar primeros auxilios" rápidamente a la población.

En las últimas semanas, unas 10 mil personas tuvieron que ser hospitalizadas por asfixia a causa de la tormenta de arena, que previamente ya ha obligado a las autoridades a cesar algunas actividades.

Irak está sufriendo las consecuencias del cambio climático, que se prevé que podría suponer una pérdida del 20% de sus recursos hídricos para 2050, según el Banco Mundial.

Kuwait, también en aprietos

La tormenta se extendió este lunes al país vecino Kuwait donde también fue cerrado el aeropuerto internacional.

Mientras que Riad, capital de Arabia Saudita fue cubierta por una espesa nube de polvo.