Masacre de Nochixtlán, crímenes de lesa humanidad e impunidad en la 4T

Por Florentino López Martínez

Este 19 de junio del 2023, se cumplieron 7 años desde que un operativo policiaco encabezados por la Policía Federa (hoy Guardia Nacional), en coordinación con los diversos cuerpos de seguridad del Estado de Oaxaca, masacraron una protesta pacífica que inicialmente mantenían los maestros de la Sección 22 del SNTE-CNTE, en contra de la denominada “Reforma Educativa” que había sido impuesto desde  el 2013 por el Presidente Enrique Peña Nieto, pero 3 años después (2016), no había logrado aterrizar, por la férrea oposición de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en distintos estados del país. 

A más de un mes del paro indefinido que los maestros de Oaxaca habían declarado contra la implementación de la evaluación punitiva, como instrumento de la “Reforma educativa”, tras la detención de los principales dirigentes de la Sección 22 (detenidos el 12 de junio del 2016), incluyendo el Exsecretario General, el Profr. Rubén Núñez Gines; el gobierno de Peña Nieto, pretendió someter por la fuerza a los más de 80 mil maestros de Oaxaca, enviando a miles de policías federales, que tenían la orden de reprimir la protesta en coordinación con los policías del entonces Gobernador Gabino Cué Monteagudo. Por lo que días antes del 19 de junio del 2016, por vía aérea y terrestre, desde la Ciudad de México y distintos estados de la república, los federales se trasladaron hacia la capital de Oaxaca; uno de los convoy’s más grande de los policías que se trasladó por tierra, pretendía ingresar por la autopista Oaxaca-México, en donde los maestros de la región Mixteca, mantenían un bloqueo a la altura de Asunción Nochixtlán. 

Aquel domingo 19 de junio, día de plaza en Nochixtlán, el intento de desalojo del bloqueo, sobre la autopista, se convirtió en una batalla desigual; las fuerzas policiacas estatales y federales fuertemente pertrechados con gases lacrimógenos, con armas de uso exclusivo del ejército, apoyados por un helicoptero, enfrentaron a los maestros y al pueblo mixteco, que resistió con piedras, palos, cohetones, y lo que encontraran a su paso, resistieron por más de 5 horas, evitando el paso de los policías hacia la capital del estado; mientas otros miles de maestros en el Crucero de Viguera y Hacienda Blanca (entrada de la Ciudad de Oaxaca) y otros pueblos cercanos como Telixtlahuaca y Huitzo, principalmente, también enfrentaron de la misma manera, la criminal represión de los gobiernos.

Florentino López Martínez

8 asesinados por las fuerzas policiacas: Jesús Cadena Sánchez (19 años), Yalid Jiménez Santiago (29 años), Oscar Luna Aguilar (23 años), Omar González Santiago (21 años), Anselmo Cruz Aquino (33 años), Oscar Nicolás Santiago (21años), Silvano Sosa Chávez (40 años), Jovan Azael Galán Mendoza (18 años); cientos de heridos, muchos de ellos de armas de fuego; lo que obligó a la Procuraduría General de la República (hoy Fiscalía General de República) abrir 32 carpetas de investigación, a lo que se sumó una proceso de indagatoria que hizo la Comisión Nacional de los Derechos (CNDH) y una comisión especial del Congreso de la Unión, por la gran presión nacional e internacional que desde entonces se generó por este crimen. 

La masacre de Nochixtlán, se quedó en la maraña de investigaciones a lo largo de casi 2 años y medio del gobierno de Peña Nieto; con lo que se verificó la firme y muchas veces expresa intensión de ese gobierno de proteger a los criminales que ordenaron y ejecutaron el llamado “Operativo Oaxaca”. El domingo 20 de octubre del 2019, el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), después de negarse a recibir a los integrantes del Comité de Víctimas 19 de Junio Por la Verdad y la Justicia, en una gira en Nochixtlán; por la tarde del mismo día, acompañado del entonces Gobernador Alejandro Murat fue obligado en Cuicatlán, Oaxaca, de escuchar por algunos minutos a las víctimas de Nochixtlán, a quienes les ofreció “apoyo y justicia”, les dijo “a todos ellos se les va a apoyar. Ya dí instrucciones y se va a cumplir”, le dijo a don Sergio Luna, padre de Oscar Luna, uno de los jóvenes asesinados el 19 de junio del 2016.
 
Han pasado casi 4 años, desde que el presidente AMLO empeñó su palabra, y no ha ocurrido nada; por el contrario, apenas el 11 de junio pasado, el juez federal Álvaro Niño Cruz, dejó en libertad a Ismael N, uno de los policías cuya arma salió positivo de dispararle al joven Oscar Nicolás Santiago; esto, aunado a la negativa del Presidente, de sus Secretarios de Gobernación que han pasado en esta dependencia, de establecer una mesa de alto nivel para resolver las demandas de justicia de las víctimas, confirma ahora la falta de voluntad del gobierno de la autodenominada 4T, para castigar los delitos de lesa humanidad cometidos por los gobiernos anteriores. 

El trato que tiene la demanda de justicia por la masacre de Nochixtlán, es el mismo desprecio que han tenido otros casos, como la masacre de Aguas Blancas (28 de junio de 1995), la cruenta represión de Ulises Ruiz y Vicente Fox contra la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) en el año 2006; la desaparición forzada de los 43 normalistas de ayotzinapa (26-27 de septiembre del 2014), la masacre de Huazantlán del Rio, San Mateo del Mar (21 de junio del 2020), las masacres contra el pueblo Triqui en Oaxaca; las incursiones paramilitares contra los caracoles zapatistas; la constante en todos estos casos, es la misma: oídos sordos del gobierno, respaldo total de la presidencia a los cuerpos políciacos federales y estatales, el ejército y la marina; impunidad y libertad de operación para los grupos paramilitares. 

En un esfuerzo por analizar estos temas, con motivo de los 7 años de la masacre de Nochixtlan, este 18 de junio, la Red Estatal de Víctimas de Oaxaca-Tomás Martínez, organizó un foro en la capital de Oaxaca; en donde se reafirmó por parte de los ponentes: Antonio Orozco Michel ex militante de la Liga 23 de septiembre, Adriana Urrea Torres, Secretaria General del SUTNOTIMEX, Profr. Jorge Velazquez de la Comunidad de Amilcingo, Morelos y el profr. Manuel Alejandro Cruz, Secretario de Relaciones de la Sección 22; quienes coincidieron en que la lucha de los sindicatos, las organizaciones sociales y los pueblos deben de unir sus luchas para alcanzar la solución de sus demandas sociales, laborales y de justicia. Con lo expuesto en el foro y la multitudinaria movilización magisterial-popular en Nochixtlán, queda en evidencia la impunidad en la que se mantiene la masacre del 19 de junio, y otros casos de delitos de lesa humanidad.

Nochixtlán

Todo parece indicar que será la impunidad, la marca con que cierre este gobierno; hasta hoy, no hay ninguna señal que nos indique lo contrario, lo que no se ha hecho en más de 4 años, no se hará en lo que queda esta administración.

Esto obliga por un lado a las víctimas, a las organizaciones sindicales y populares a empeñar sus esfuerzos por luchar unitariamente desde ahora y en todo el periodo que viene; y por otro lado, las denominadas corcholatas que ya están en plena campaña por la sucesión presidencial a tomar posición frente a esto que constituye en los hechos un pacto de impunidad de la 4T; inclusive, la recién nombrada Secretaria de Gobernación Luisa María Alcalde, debería asumir con responsabilidad la ausencia de justicia sobre estos casos.