Tras la ubicación de válvulas cerradas, el jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, advirtió que la persona o grupos que estén interrumpiendo el servicio del agua incurren en un delito homólogo al sabotaje.
Esta falta es castigada con cárcel, la pena va de cinco a 15 años, de acuerdo con los lineamientos del Código Penal de la Ciudad de México vigente, advirtió esta mañana el jefe de gobierno, en conferencia de prensa.
El delito de sabotaje implica “trastornar la vida económica, política, social o cultural o alterar la capacidad del Gobierno para asegurar el orden público”, según el capítulo III del Código Penal local.
El mandatario capitalino detalló que la fracción III del artículo 363 señala que entorpecer ilícitamente los servicios públicos, como lo es el del suministro de agua potable, es sabotaje y para este ilícito la pena es de cinco a 15 años de cárcel.
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Incurrir en acciones de sabotaje también incluye la suspensión de los derechos políticos de uno a siete años, aseveró Mancera. Con esa anulación, los ciudadanos están imposibilitados para participar en la vida política del país, es decir, pierden su derecho al voto, la posibilidad de ser postulados a candidatos de elección popular, así como su intervención en asuntos públicos.
Este miércoles el gobierno de la Ciudad de México encontró al menos 50 puntos donde han sido cerradas las válvulas de agua en las delegaciones de Iztacalco, Venustiano Carranza, Coyoacán, Azcapotzalco, Iztapalapa y Benito Juárez, que ha derivado en la demanda ciudadana de los afectados y manifestaciones viales.
Ante esta problemática, el director del Sistema de Aguas de Ciudad de México (Sacmex), Ramón Aguirre, informó que implementará medidas de vigilancia en las zonas de válvulas y denunciará para dar con los autores que han interrumpido el servicio del agua.
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Para reforzar la seguridad usarán las cámaras del C-5, efectuarán operativos de elementos de la policía capitalina así como de autoridades delegacionales, y colocarán chapas en los registros como otra medida más para evitar que personal externo al Sistema de Aguas, manipule las válvulas, las cuales, explicó, son subterráneas y hasta ahora de fácil acceso, ya que basta levantar el registro, bajar y mover una empuñadura para interrumpir el servicio del líquido vital.
50 válvulas cerradas intencionalmente para cortar el agua, tomas clandestinas en la red de @SacmexCDMX y la solución es poner candados y seguridad que nos van a costar a los ciudadanos!!! ¿Que no hay autoridad?
— Gabriela Tlaseca (@gtlaseca) 8 de marzo de 2018
