Conversando con Alicia Labrador: bienestar y belleza desde la autenticidad

Ciudad de México.- Cuando entras al consultorio de Alicia Labrador en Miami, lo primero que notas es la calma que transmite el espacio. "Quise crear un lugar que no solo fuera bonito, sino que generara tranquilidad desde el momento en que entras", cuenta Alicia con una sonrisa genuina, mientras nos sentamos a conversar sobre su trayectoria y el propósito detrás de su empresa, Aliestetic.

Alicia Labrador es venezolana. Llegó a Estados Unidos en 2015, enfrentándose a la misma incertidumbre que acompaña a cualquier inmigrante. "El inicio no fue fácil. Aunque tenía mucha experiencia en dermatocosmiatría en Venezuela, acá me tocó volver a certificarme y aprender cómo funciona este nuevo mercado. Pero creo que eso fue clave: me obligó a entender desde cero lo que realmente buscan las personas cuando vienen por un tratamiento estético", reflexiona con sinceridad.

Su trayectoria de más de veinte años en el mundo de la estética y la belleza le permitió detectar un aspecto que otros pasaban por alto: la importancia del bienestar integral. "No se trata solo de verse bien. Muchas veces las personas llegan buscando algo externo y terminan encontrando que lo que realmente necesitan es sentirse mejor con ellas mismas. Esa conexión entre lo interno y lo externo es lo que me inspira cada día", explica.

Impulsada por esta filosofía, Alicia decidió crear Aliestetic, una clínica que integra tecnologías innovadoras con un trato cercano y genuino. "Cada paciente es un mundo diferente, y cada tratamiento debe reflejar exactamente eso. No existe una fórmula única porque cada persona tiene necesidades y expectativas propias", señala con claridad.

Al conversar con Alicia, es evidente su pasión por ayudar a otros a descubrir su mejor versión. Esto la llevó a crear también "Elévate", una academia orientada a la formación de profesionales en estética. "Había muchos latinos, especialmente mujeres, queriendo entrar en esta industria pero con pocas herramientas para hacerlo bien. Sentí que tenía la responsabilidad de compartir lo aprendido, no solo desde lo técnico, sino enseñando cómo gestionar y mantener un negocio propio", comenta con orgullo.

Además de la clínica y la academia, Alicia lanzó VitAli Cosmetic, su línea propia de cosmética. Con sencillez y cercanía, explica que estos productos surgieron de forma orgánica, al notar las necesidades prácticas de sus clientes. "Quería que mis pacientes pudieran mantener fácilmente en casa los resultados que obtenían en la clínica, con productos que fueran accesibles, efectivos y confiables", comenta con naturalidad.

Actualmente, Aliestetic tiene presencia en Miami y Orlando, con planes para expandirse a otras ciudades de Florida como Naples. Alicia lo menciona sin grandilocuencia, pero con la satisfacción de quien ha construido algo sólido y honesto. "Cada expansión es un paso pensado cuidadosamente. No crecemos solo por crecer, sino para mantener la calidad y cercanía que siempre nos ha caracterizado", aclara.

Cuando se le pregunta cómo equilibra tantos proyectos, responde con una carcajada espontánea: "¡Con mucha organización y un equipo increíble! Sola jamás podría. Siempre busco rodearme de personas comprometidas y apasionadas como yo, eso hace la diferencia".
Para Alicia, la belleza está lejos de ser superficial. "Es una manera de cuidar de ti misma, de expresarte y de sentirte segura. Pero también es entender que todo esto tiene sentido cuando estás en equilibrio, cuando lo haces para ti y no solo por cumplir expectativas externas", concluye con una calma que contagia.

Al despedirnos, queda claro que Alicia Labrador ha creado más que un negocio exitoso; ha construido un espacio donde el bienestar y la autenticidad van de la mano. Su historia es la de alguien que supo adaptarse y crecer, siempre manteniendo intacta su esencia.