Hugo Blanquet, Miss Diamond: El Drag que no se vende

Instagram:  hugoblanquet_oficial

Por María Fernanda Delgado

Si aún no lees la primera parte puedes encontrarla dando clic aquí.
 

Cuando las luces de neón se apagan, el teatro se vacía y el eco de la última risa desaparece tras la función final de la noche, sólo queda emprender el camino a casa o al hotel de la ciudad en la que se encuentre de gira, mismo que, peligroso o no y a veces aún con maquillaje y peluca, Hugo Blanquet recorre junto a un staff al que considera parte de su familia (como ha documentado en su serie “Acceso Total: Fama Engañosa”) o con la única compañía de Miss Diamond, personaje del que no puede simplemente despojarse para meter en su maleta, sino que forma parte de su persona, al punto de cambiar su forma de hacer comedia y permitirle aceptarse finalmente como un hombre travesti.

El arte drag no es un arte que está a la venta, no se puede vender el arte drag y quiero que me recuerden como alguien que es coherente con lo que hago, lo que pienso y lo que doy en el escenario”, aseguró.

 

LA DIVA GUAPA DEL STAND UP

La historia de Miss Diamond comenzaría con un Hugo Blanquet inmerso en el stand up, escena en la que gracias al trabajo arduo y el apoyo de personalidades como Adal Ramones, a quien señala como el primero que le dio una oportunidad, consiguió consolidarse y figurar entre los principales exponentes queer de esta nueva forma de hacer comedia.

Mira, yo cuando conocí el stand up ya lo hacía yo, nadamás que era un texto en la obra, sólo le quitamos todo el movimiento, todo el marcaje, toda la utilería y queda un monólogo de stand up, y así también fue el drag. El drag fue un paso normal que agradezco haber dado desde hace más de 20 años”, señaló.

 

 

Cabe destacar que, en ese momento, hace más de una década, la escena mexicana del stand up, ahora tan heterogénea e inclusiva como los términos permitan al lector imaginar, comenzó siendo más bien influenciada por el estilo de los grandes humoristas estadounidenses y con una predominante presencia masculina, motivo por el que sus contrapartes femeninas y los comediantes pertenecientes a la comunidad LGBT tuvieron que abrirse brecha e incluso crear sus propios espacios.

Fue así que la ahora dupla Hugo Blanquet - Miss Diamond comenzó a presentarse en todos los lugares posibles, en la capital y a lo largo de la república, incluyendo eventos poco convencionales como palenques y sitios en los que aún no se daba cabida al stand up como entretenimiento, hecho que múltiples colegas le han reconocido como la apertura de nuevos espacios para sus shows.

Si entregas el alma se dan los resultados. Puedes empezar de nuevo a los 35 años, hay segundas, terceras y cuartas oportunidades en esta vida y si haces lo que quieres hacer, honestamente y con tu verdad, que te salga de la entraña, los resultados se dan”, sentenció.

Y LLEGÓ LA DRAGA MARAVILLA

La vida de Hugo Blanquet cambiaría también de forma radical durante la pandemia. La falta de shows y eventos, así como el confinamiento le afectarían tanto como al resto del gremio, sin embargo, también sería decisiva para la creación de “La Draga Maravilla”, la versión superheroína de Miss Diamond, inspirada en personajes icónicos como Daniel Vives "La Supermana" y cuyo podcast, que comenzó siendo grabado con un móvil desde su cocina, logró acumular más de 50 episodios, con invitados de todo tipo y abordando temas que van de la comedia al activismo. 

El crecimiento gradual de este proyecto habría traído consigo la creación de otro único en su tipo, “La Dragademia”, show de streaming en el que sus invitados, regularmente neófitos en el drag y heterosexuales, se transformaban de pies a cabeza en una drag queen para dar un show frente a público en vivo. Esta fantasía musical, que contó con la participación de personajes como Slobotsky y Ricardo Pérez, realizó 3 ediciones.

 

Lo que estoy haciendo ahorita, sólo que sin peluca porque no sabía que iba a ser draga, es lo que siempre soñé, estar en un escenario, estar con el público, mientras lo pueda seguir disfrutando va a ser maravilloso y espero que la vida me permita morir después de un show, después de sentir esa adrenalina”, declaró.
 

FUCKING PERFECT

De la Biblia censurada, por la iglesia soy temida, señalada, criticada…

Sin embargo no todo ha sido brillo y color, ya que además del grado de irreverencia y acidez de su comedia, muchas de sus declaraciones le han valido señalamientos y polémicas en redes sociales. Pese a esto Hugo Blanquet ha defendido sus posturas, destacando que no busca la responsabilidad de ser un ejemplo a seguir ni desea ser “políticamente correcto” si eso significa asumir la “superioridad moral” y buscar cambiar opiniones mediante el señalamiento. En cambio, asegura que, el hacer reír al público puede convertirse en la mejor manera de hacer llegar un mensaje.

Recién encontré un sentido del porqué cuando yo era niño no tenía tantos amigos, la gente decía ‘es que tu dices las cosas sin pensarlas’, pero eso es precisamente lo que me hizo Miss Diamond, ser como soy. (...) Yo soy una persona muy transgresora, no soy políticamente correcto y no me interesa serlo, no me interesa venderle mi cuerpo, mi culo y mi ser a un grupo de personas que se creen con la superioridad moral de juzgar a los demás, yo lo digo basado en el respeto, del vamos a tomar un momento agradable para reirnos, nunca viene de un lado de odio. Creo que mi stand up puede ser correctivo, pero basado en la risa” concluyó.