Berlín.- La ultraderecha en Alemania convocó a una nueva movilización contra inmigrantes que se llevará a cabo el próximo sábado 1 de septiembre en la ciudad de Chemnitz, luego de que la madrugada del pasado domingo el alemán de origen cubano, Daniel Hillig, fuera asesinado presuntamente por un sirio y un iraquí.
Este lunes el partido Alternativa para Alemania (AFD) y el movimiento xenófobo Pregida llamaron a sus seguidores a manifestarse, a lo que medios locales calificaron como una concentración neonazi.
En su discurso el líder de AFD, Joerg Meuthen, justificó las protestas violentas que se han registrado en el país durante la presente semana. Aseveró que se trata de una reacción ciudadana por la muerte de Hillig.
El político de derecha negó en declaraciones divulgadas por la cadena estatal SWR estar "avivando las llamas" pues, en su criterio, esas manifestaciones ultranacionalistas" reflejan un malestar generalizado en la sociedad por la llegada de más de un millón de extranjeros al país desde 2015".
Chemnitzer Morgenpost mit Photo von Daniel H. auf der ersten Seite.
— Karl - L. Poggemann (@Karl_Ludwig_P) 27 de agosto de 2018
#c2708. #Chemnitz pic.twitter.com/6q2cM9UlLo
Pero la reacción del gobierno alemán fue inmediata. La canciller, Angela Merkel, rechazó "la incitación a la violencia xenófoba" y manifestó el pasado martes que "el odio no cabe en las calles de Alemania".
Merkel condenó los disturbios y advirtió:
"Tenemos grabaciones de video de las persecuciones, motines, del odio en las calles, y eso no tiene nada que ver con nuestro Estado constitucional".
#c2608 Video: Fascists attacking a migrant in #Chemnitz #Germany today. This was 1 of many attacks out of a demo of more than 1000. Fascists are mobilizing to Chemnitz for tomorrow again.
— Enough is Enough! (@enough14) 26 de agosto de 2018
Video by @AZeckenbiss pic.twitter.com/uIfuLPxg4a
La Policía germana tiene en curso una investigación por el empleo de símbolos nazis y el uso del saludo hitleriano (alegórico a Adolfo Hitler) durante las manifestaciones ultraconservadoras en Chemnitz.
La ley germana considera las esvásticas, los signos de las fuerzas élites represivas SS, del Tercer Reich, y otros relacionados con el nazismo, como "símbolos de organizaciones anticonstitucionales", y su empleo podría dar lugar a una multa o hasta tres años de prisión en virtud del Código Penal.
Con información de Prensa Latina
