‘El género negro, historias donde la moral es puesta a prueba’: Nicolás Ferraro

Por Atzin Nieto 

Ciudad de México.- Si hablamos de novela negra escrita en Latinoamérica son varios los nombres que podrían venir a colación, sin embargo, son pocos los verdaderos autores que abrazan al género y proponen historias inteligentes, con personajes entrañables y escenarios llenos de pólvora, venganzas y traiciones. Nicolás Ferraro pertenece a estos últimos, al ser un joven escritor argentino que ha apostado por llevar al género negro a nuevos horizontes, después de haber quedado finalista en el 2018 con su obra Cruz en el premio Dashiell Hammett a la mejor novela negra que otorga la Semana Negra de Gijón, en España, Ferraro, por fin, se alza con el galardón gracias a su novela Ámbar publicada en México por la editorial Nitro/Press en coedición con la BUAP. 

“Cuando me enteré que quedé finalista fue algo inesperado porque ya había quedado con ‘Cruz’ hace cuatro años y era como ¡wow!, de vuelta nominado al premio más importante, para los que escribimos género negro el Dashiell Hammett es la copa del mundo por lo que representa. Fue el evento casi fundacional de lo que es el policíaco en la semana negra de Gijón.

Esto que se hace vale la pena y hay un reconocimiento que lo dice. Luego uno ve el listado de los escritores que lo han ganado y quedado finalista y dices, acá están los popes. Ganó Ricardo Piglia y también Claudia Piñeiro, voces muy consagradas. Cuando gané, sinceramente no lo esperaba. Hay algo ahí que todavía no termino por descifrar, pero ya para mí era como un sueño que tenía de ganar el premio y ahora a seguir trabajando y escribir la mejor novela posible. Quizá en algún momento quedar de vuelta nominado”, mencionó.

Para Ferraro escribir es más que una pasión; es una forma de vida. Por lo que Ámbar podría considerarse su novela más ambiciosa hasta el momento.

“Cuando yo me pongo a escribir a lo único que le tengo que ser fiel es a la historia. Lo que me interesa es contar la mejor historia posible de la mejor manera y tratando de no repetirme, de ir probando cosas nuevas y tratar de divertirme. Ya había escrito otras historias de padres e hijos, como que siempre estoy dando vueltas sobre eso y también la violencia está en un primer plano. Hoy, terminada la novela puedo volver atrás y decir: ‘Lo que me interesa era salir del lugar común, tener un desafío para mí como escritor que era poner un adolescente que viviera en un estado de constante violencia porque el padre es un criminal y que se ve obligada a estar con él y a quererlo obviamente porque es su padre. El conflicto. El drama familiar es lo que me interesa ahí. El vínculo de sangre es lo más fuerte que tenemos y era como plantear esto de qué tanto pesa la sangre y si lo puedo poner en tensión ya que por la familia hacemos todo. Eso quería poner’. Por otro lado, trabajar la violencia en la habitación de al lado, el padre es un matón, pero ella como que no está muy consciente de quién es realmente su padre y en el transcurso de la novela ya no develar quién intentó matar al padre sino de ver quién es el padre y ahí sí ya la violencia salpica a la protagonista. Eso era un poco de lo que yo quise hacer ahora que tengo la novela terminada. Después cualquier cosa que venga es un plus”, aseguró.

El simple arte de escribir

Como bien lo manifestaba Chandler en su ensayo sobre escribir género negro, Ferraro hace lo propio desde su época y contexto. 

“Lo más difícil para mí a la hora de escribir una novela es encontrar la voz del texto. 

A veces yo digo que un escritor tiene 150 mil palabras malas encima y que se las tiene que sacar. Irónicamente la única manera de sacárselas es escribiendo si uno no escribe, si uno pretende que lo primero que escribe es una genialidad lo más probable es que no escriba nunca nada. Yo tengo esa filosofía la de escribir porque me gusta contar historias y cada vez que lo hago aprendo un poquito más. 

“Las novelas negras son historias en las que se intenta sobrevivir al caos. El género negro para mí son historias en donde la moral es puesta a prueba, la moral puesta a prueba mediante la posibilidad de un crimen”, finalizó.