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En 1966, la Copa del Mundo llegó a la nación que vio nacer el balompié como deporte, Inglaterra era la sede de la justa y Brasil llegaba con la intención de conseguir el tricampeonato después de deslumbrar el mundo en Suecia 1958 y Chile 1962.
Pero fue el equipo local el que aprovechó el impulso de su gente para llegar a la final y con un ‘gol fantasma’, consiguió levantar la única Copa del Mundo de su historia.
cmb
