Gobierno nicaragüense expulsa a misión de Derechos Humanos

Managua.- La situación en Nicaragua parece no mejorar y aunque hiciera un llamado a disminuir las medidas de represión y violencia en el país, el gobierno decidió expulsar de manera inmediata a la misión de la Alta Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH).

Dicha dependencia estaba a cargo de supervisar la situación de los nicaragüenses para defender sus derechos; sin embargo, el presidente, Daniel Ortega, ordenó que se retirara del país sin darles la oportunidad de negociar la decisión.

Al respecto, la presidenta del Centro Nicaragüense de los Derechos Humanos (CENIDH), Vilma Núñez, calificó de “absurda, insólita e inesperada” está orden que envía un mensaje “gravísimo” a todas las organizaciones internacionales, pues, básicamente, da a entender que a Ortega no le interesa velar por los derechos humanos, mucho menos si se involucran agentes externos al país.

La razón por la que la ACNUDH, fue forzada a salir es porque “ya había cumplido con sus razones, causas y condiciones por las que fue invitada”; la comisión estuvo en Nicaragua desde el pasado 26 de junio, fecha en las que se les hizo la solicitud de ir al país para monitorear la situación de los derechos humanos.

Este anuncio coincide con el informe de la oficina en la cual se exigió poner fin a la brutalidad del régimen que ha cobrado la vida de más de 320 personas y en el cual dos mil ciudadanos han resultado heridos.

“La violencia e impunidad de los últimos cuatro meses han puesto de relieve la fragilidad de las instituciones, el país y del estado de derecho, y han generado un contexto de miedo y desconfianza", aseguró el alto comisionado de la ONU, Zeid Ra’ad al-Hussein.

Al respecto, Ortega respondió que la ACNUDH es un “instrumento de los poderosos que imponen su política de muerte” y agregó que en sus informes no se toman en cuenta a las víctimas sandinistas que han dado su vida por defender al gobierno de Ortega.

Vah