A los 92 años fallece Bárbara Bush, exprimera dama de EE. UU.

Este martes falleció la exprimera dama de Estados Unidos, Bárbara Bush, a los 92 años, rodeada de su familia en su hogar al este de Houston, Texas.  

Su familia informó que la esposa del expresidente George Herbert Walker Bush, y madre de quien fue jefe de Estado, George Walker Bush, suspendió desde el domingo su tratamiento médico, que la ayudaba con la insuficiencia cardíaca congestiva y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, que sufría.  

Los padecimientos contra los que luchaba y por los que tuvo varias hospitalizaciones, fueron la causa de su deceso.  

La exprimera dama nació en Nueva York, el 8 de junio de 1925, y es una de las dos mujeres que fueron madre y esposa, de dos presidentes de Estados Unidos. 

Bárbara conoció a George H.W. Bush en una fiesta en Connecticut, cuando tenía 16 años y estaba en una salida vacacional de su internado en Carolina del Sur; mientras que él era un cadete de la Academia Phillips en Andover, Massachusetts. 

Se comprometieron un año y medio después, cuando Bush se preparaba para ir con la Marina, a combatir durante la Segunda Guerra Mundial, y se casaron el seis de enero de 1945.  

El matrimonio de los Bush duró 73 años y tuvieron seis hijos: George W., Jeb, Neil y Marvin y las hijas Dorothy, Koch y Robin Bush, quien falleció por la leucemia. 

Mientras la carrera de Bush avanzaba, Bárbara siempre se mantuvo como un personaje activo, por lo que fue reconocida por su ingenio y su estilo.  

 Sin embargo, en su libro “Bárbara Bush: Una Memoria”, publicado en 1194, confesó que no siempre estaba de acuerdo con su marido y los hombres de su familia, ya que ella tenía ideas más liberales sobre el aborto y el control de armas. Aunque, también se describió como una esposa dócil.  

Bárbara Bush se dedicó a fomentar la alfabetización, a través de campañas, durante y después de la presidencia de su esposo. En 1989, creó una fundación que alentaba a los padres a leerle a sus hijos.  

"Si más personas pudieran leer, menos personas tendrían SIDA. Habría menos personas sin hogar. Estoy absolutamente convencida de eso".