Ciudad de México.- Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de Gobierno regresó al pleno del Congreso de la Ciudad de México la nueva Ley de Salud, al considerar que el dictamen va en contra del “gobierno republicano, democrático, representativo, laico y popular”.
La decisión de la mandataria ocurre a 42 días de que esa instancia legislativa diera su aval a la normativa.
De acuerdo con Sheinbaum Pardo, el “error” de los legisladores es que en el artículo 6, fracción XXV, establecen en la definición de “interrupción legal del embarazo”, un concepto que no es acorde con el marco jurídico nacional, particularmente con la norma NOM-04-SSA2-2005, ni a lo que establece la Ley General de Víctimas.
“Por lo que es menester un análisis riguroso de dichas normas, que permitan homologar los derechos de las mujeres, así como su acceso a los servicios de salud”, pronunció la política morenista, quien avisó que en el documento que le hizo llegar a Patricia Báez Guerrero (PAN), presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local, le detalla sus observaciones.
Sheinbaum Pardo subrayó que los diputados incorporaron una definición de “interrupción voluntaria”, en la que establecen la ampliación de 12 a 20 semanas para que se acceda a los servicios de salud pública con el objetivo de interrumpir la gestación, cuando la concepción fue secuela de una violación no denunciada.
Debido a ello, reiteró que en el análisis del decreto la definición para dicho concepto, no se ajusta a la Ley General de Atención a Víctimas.
Con información de El Universal
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