El tiro “le salió por la culata” al delantero mexicano Hirving Lozano y a su club, el PSV Eindhoven.
El futbolista acudió ayer a las instalaciones de la Federación Holandesa de Futbol (KNVB) para apelar la sanción de tres partidos por su expulsión el pasado fin de semana y en lugar de que le redujeran el castigo, se lo aumentaron un partido más el día de hoy.
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En su audiencia de ayer, el Chucky argumentó que no tuvo la intención de agredir al defensa del Heerenveen en la jugada que le costó la tarjeta roja, sino que quiso quitarse la mano de su rival y sin querer lo contactó.
Durante la comparecencia, autoridades del PSV presentaron varios testimonios para defender a su jugador; como que el árbitro del partido reconoció en una entrevista que fue su abanderado el que le dijo que debía ser expulsión; o que de cuatro expertos en videorbitraje consultados por el club, tres admitieron que no debió ser roja.
Sin embargo, la KNVB dio su veredicto este viernes y aumentó de tres a cuatro partidos la suspensión para Lozano argumentando “reincidencia” de parte del mexicano, pues éste fue expulsado en septiembre del año pasado por una jugada similar ante el mismo equipo.
Lozano voor drie duels uitgesloten door tuchtcommissie: https://t.co/LpJRHVE1gT.
— KNVB (@KNVB) 23 de febrero de 2018
De tal manera, el Chucky estará fuera de las canchas un mes y se perderá partidos ante Feyenoord, Utrecht y Willem II. Lozano es líder de goleo en la liga holandesa con 12 tantos y su club comanda la tabla con 62 puntos, cinco más que el sublíder Ajax.
“Lozano es un jugador hábil, que será profundamente extrañado, por lo que tendremos que montar una sólida exhibición de equipo para compensar su ausencia”, declaró su entrenador, Phillip Cocu.
