Critica la CIDH orden de Trump para mantener abierto Guantánamo

Luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, indicara que busca mantener abierta la prisión militar de Guantánamo y así poder trasladar a las instalaciones a nuevos detenidos, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó la orden y reiteró su llamado a la administración estadounidense para el cierre de ese reclusorio, al cual se le ha impedido el acceso de miembros de la CIDH, además de ignorar medidas cautelares otorgadas a favor de detenidos que se encuentran en dicho sitio.

Por tal motivo, el presidente de la CIDH, Francisco José Eguiguren Praeli, acusó que “la continua detención de personas en Guantánamo es arbitraria y constituye una clara violación a los estatutos internacionales”.

El titular del organismo aseguró además que desde hace mucho tiempo Estados Unidos tuvo que haber cerrado las instalaciones, pues dicha prisión se ha colocado como un símbolo de abuso alrededor del mundo.

Cabe señalar que el 30 de enero Trump firmó una orden para reafirmar que su gobierno utilizará la prisión militar de Guantánamo, y describió a la cárcel como “legal, segura y humana, conducida consistentemente con la ley”.

Además, se informó que James Mathis, secretario de Defensa Nacional presentará a Trump recomendaciones de política en 90 días referencia al envío de nuevos prisioneros a esas instalaciones.

Cabe señalar que durante el gobierno del presidente Barack Obama se transfirieron 10 personas a Omán, con lo cual la población se redujo a 45 detenidos, dejando claro el contraste entre su gestión y los 242 que había cuando asumió la Presidencia.

El organismo internacional indicó desde la apertura de esa cárcel en  2002 se ha monitoreado la situación de los derechos humanos de los detenidos, por lo que la CIDH otorgó medidas cautelares a favor de los encarcelados.

Por otro lado, desde 2007 la CIDH ha pedido en varias ocasiones autorización para visitar el centro; sin embargo, todas sus peticiones fueron negadas.

Asimismo, Margarette Macaulay, comisionada de dicho organismo exhibió que la detención de personas en Guantánamo es arbitraria y constituye una grave violación al derecho internacional de los derechos humanos.