El 'pueblo bueno y sabio' de La Huacana

Por Ricardo Ortiz

Es monumental y vergonzoso ver el video que publicaron los habitantes de La Huacana, Michoacán, donde se puede apreciar la forma en que denigran a varios soldados de la Quinta Compañía de Infantería del Ejército, los cuales fueron retenidos, amenazados y golpeados durante 8 horas. 

Fuentes periodísticas afirman que este suceso se dio el día domingo alrededor de las 3 de la tarde en la región de Tierra Caliente del estado de Michoacán. Varios pobladores se juntaron en varios puntos de ese municipio y cerraron algunos accesos a la ciudad, debido a la inseguridad que se vive en esa entidad. Militares acudieron a los puntos donde se encontraban esos pobladores y les decomisaron un Barret calibre .50 milímetros, dos cuernos AK 47 de 7.62 mm y un AR 15.223. Por alguna extraña razón, los miembros del Ejército se vieron sorprendidos por una multitud y los retuvieron. Los pobladores les quitaron sus armas a los soldados y exigieron que se les regresaran las suyas porque “ellos no eran un grupo armado, sino eran pueblo”.  

La liberación de los rehenes (soldados) fue a cambio de las armas aseguradas. 

El grupo de personas que retuvo a los miembros de la Quinta Compañía de Infantería  ha sido identificado como una autodefensa que sigue vigente desde 2013, cuando el doctor Míreles organizó a esa comunidad para enfrentar a los Caballeros Templarios. Se refiere que ese grupo está al servicio de “Migueladas”, un capo de bajo perfil que es jefe del CJNG en los municipios de Múgica y La Huacana. 

Se sabe que desde hace unos meses, elementos de la Quinta Compañía de Infantería  con sede en el municipio de Tacámbaro, intensificaron los operativos en la zona de La Huacana y Churumuco. 

 Lo sucedido el pasado domingo es a mí parecer uno de los sucesos más vergonzosos en la historia de las Fuerzas Armadas de nuestro país, en donde nos podemos dar cuenta de que la gente que se dedica al narcotráfico o al crimen organizado, ha aprovechado la cuestión de los Derechos Humanos para faltarle al respeto a cualquier cuerpo de seguridad del Estado mexicano. El presidente López Obrador ha sido un incitador para que toda esta gente se aproveche del slogan “pueblo bueno y sabio” o que “el Ejército ya no reprimirá al pueblo”, para sentirse “pueblo” y hacer lo que le venga en gana. 

El problema aquí recae en saber cuándo un miembro del Ejército puede actuar en legítima defensa y cuándo no, especialmente, porque se corre riesgo de cometer una matanza y después ser juzgado por la ley por no respetar los Derechos Humanos del “pueblo bueno y sabio”. La culpa también la tiene el comandante de la tropa al no haber tomado una decisión inteligente para que no se vieran en ese tipo de situación.

¿Quién vela por los Derechos Humanos de los miembros de las Fuerzas Armadas? Me quiero suponer que ellos también deben tenerlos. 

La SEDENA y la SSP deben reformar los lineamientos y formas en las que el Ejército pueda defenderse sin correr un riesgo en donde se violen los Derechos Humanos o las Garantías Individuales de cualquier persona.

Esto no debe quedar impune aún y cuando esos “defensores del pueblo” sean “sabios y buenos”.

 Una vez más podemos ver que no existe el Estado de derecho en México, y que actualmente todos pueden hacer lo que quieran con un policía o soldado, ¿Por qué? Simplemente, porque el presidente dijo que el “pueblo es bueno y sabio” y “ya nadie puede reprimir al pueblo”.

La Guardia Nacional entrará en funciones al estado de Michoacán en junio, donde actualmente está brotando de manera bastante violenta todo el crimen organizado que se disputa los territorios para mover droga. Dichos grupos criminales son el CJGN, Los Viagra  y lo poco que queda de la Familia Michoacana. 

El Gobierno federal debe entender los mensajes que se han dejado en Zamora, La Huacana y otras poblaciones michoacanas; porque al parecer, el CJNG ha sido muy explicito en decirle a Andrés Manuel López Obrador que no le tiene miedo y que va con todo para controlar el tráfico de drogas en la mayoría del país y expandir su poder que se ha visto fortalecido desde el Gobierno de Peña Nieto.

La Guardia Nacional no puede verse vulnerable ante el “pueblo bueno y sabio”, y si es así, entonces, no funcionará el plan de seguridad de la 4T.