Del cielo, el fuego y el Noreste

Por Gerson Gómez Salas

“Nadie prometa el cielo”, de Jorge Luis Darcy
A la poesía, como a la mítica Roma, se puede llegar por diversos caminos, pues ella es la ciudad de las mil puertas. Plaza cercada de accesos, se vuelve inexpugnable por la evasividad de sus límites; así que para penetrar en ella no es tan importante el camino como la disposición, el instinto, el sentido de orientación del caminante. Muchos pueden andar hacia la ciudad, pero únicamente los dotados con la gracia del girasol sabrán hallar la puerta salvadora. 
    Jorge Luis Darcy ha hecho su jornada. Ha encontrado la puerta de la revelación descifrando las señas dejadas por caminantes. Se ha guiado por la voz de los que ya están dentro.

“Los confines del fuego. Diarios de Santiago Vidaurri”, de Hugo Valdés
Con una madura técnica de narrativa histórica, el autor de El crimen de la calle de Aramberri nos presenta el diario ficcional de Santiago Vidaurri, el polémico político nuevoleonés quien, para consolidar su proyecto de estado en la segunda mitad del siglo xix, transitó de la defensa de las Leyes de Reforma hacia la colaboración con el régimen monárquico de Maximiliano.

“Arquitectura popular del noreste”,  de Pablo Landa Ruiloba
El norte de México se describe por lo general como una zona urbana e industrial. Es también una zona con una gran riqueza de tipologías arquitectónicas, materiales, técnicas constructivas y modos de habitar que se manifiestan en zonas rurales.    
    A través de fotografías, dibujos, fragmentos de entrevistas y de notas de campo registradas por el equipo de Arquitectura Popular del Noreste, este libro revela algunas maneras en las que se ha conformado el territorio de la región.

“Iremos que te pienso entre las filas y el olfato pobre de un paisaje con borrachos o ahorcados”, de Minerva Reynosa
La violencia es un tema recurrente en el arte contemporáneo, los creadores analizan, reflexionan y retratan en sus obras que utilizan la pintura, la música, danza y, por supuesto, la poesía, para ofrecer una perspectiva diferente, emocional y reflexiva sobre un tema y tiene una presencia contundente en la realidad de los seres humanos del Siglo 21.
    El libro ganador del Premio Nacional de Poesía Clemencia Isaura, que se entrega en el marco de la celebración de los Juegos Florales del Carnaval de Mazatlán, se pasea por ese tema y es la regiomontana Minerva Reynosa Álvarez, radicada en Guanajuato, la ganadora de la edición 86 con el poemario Iremos que te pienso entre las filas y el olfato pobre de un paisaje con borrachos o ahorcados.