Rivotrip proclama el 10 de febrero como el 'Día del Ardido'

Foto: Cortesía de Rivotrip

Por Carlos Meraz

El existencialista escritor francés y ganador del Premio Nobel de Literatura en 1957, Albert Camus, sentenció: “No ser amados es una simple desventura, la verdadera desgracia es no amar”. Y para quienes todavía aman con pasión y locura desmedidas, sin importar no ser correspondidos, ya existe un aliciente, con día y sede para conmemorar con música de desencanto todas sus penas: Rivotrip, el 10 de febrero en la instauración del Día del Ardido, en el Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris”.

Bajo un concepto de cabaret sonorizado a todo rock, el grupo mexicano pretende sabotear la celebración del 14 de febrero, Día de Amor, con un lúdico espectáculo en directo, desde el inmueble del Centro Histórico, entre la terapia y el masoquismo idóneo para los corazones rotos, al ritmo de las baladas del pop más desgarradoras del cancionero en español.

“Si tú no naciste para amar y nadie nació para ti, si él te mintió, fuiste ave de paso, y si en el amor eres un idiota,  y has sufrido mil derrotas… Entonces, este show es para ti”, sentencia la publicidad del performance para la legión de fieles devotos de la amargura, despecho y abandono sentimental.

Rivotrip está compuesto por Jorge Fernández (batería), Guillermo Ibarra (bajo,) Richard López (guitarra), así como los performers Tareke Ortiz y Nora Huerta “Rivo”(voces).

“Es un show gótico melancólico alusivo al ansiolítico rivotril, pero con el trip adquiere un sentido de viaje hacia la amargura y el dolor, que a su vez es catártico y terapéutico para rogones y chantajistas”, explicó Huerta.

LIMÓN EN LA HERIDA

Para creyentes y practicantes de que “el dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional”, el show de Rivotrip ofrecerá 90 minutos de música con honestidad brutal y energía liberadora para todo aquel ser que colectivamente deseé “salir del clóset del desamor” con nuevas versiones a temas de Juan Gabriel, Amanda Miguel, Emmanuel, Lupita D’Alessio o del príncipe de… los ardidos, José José.

“Ahí nadie será flechado por Cupido, al contrario,  agarraremos a flechazos a ese condenado escuincle pedorro”, advirtió Huerta entre risas.

Así que aquellos enamorados en pareja, partidarios del amor propio y corazones sin heridas favor de no presentarse en la proclamación del Día del Ardido, una fiesta musical exclusiva para el goce del inconmensurable rencor, el impostergable desconsuelo y la incapacidad de olvido.

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