Espada de Dos Manos: El Fiscal General y los dos mil millones

Por Marcelo Fabián Monges / Escritor y Periodista

Uno se pregunta en qué momento López Obrador pasó de ser la esperanza de México, en especial de los 30 millones de ciudadanos que lo votaron, a convertirse en el hazmerreír de la población, algo que se ve muy claro en las redes sociales. No tenemos en cuenta para este análisis las distintas encuestas pagadas desde el gobierno para que le den una aprobación que no tenía ni Obama, para decirlo en términos del habitante de Palacio Nacional. 

Los temas de la tragicomedia que representa la 4a transformación, para hacer reír a la población, por no elegir la opción de llorar, son muchos: desde las mentiras cotidianas del presidente hasta el sobrenombre que él mismo se puso, con un discurso que se excedió en lo vulgar, y que ningún presidente que se precie de tal pronunciaría, en ningún lugar del mundo, dando lugar a un par de hashtag que está en primer lugar de las tendencias desde hace tres días. 

Vamos a mencionar solo algunos temas, de estos que son parte de la tragicomedia de la 4ª. Transformación, porque pretender enumerarlos a todos, desde que asumió López Obrador, daría lugar a una enciclopedia, algo que no cabe en el espacio de una columna de opinión. 

El día martes 11 de febrero, el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, para detener el sismo bajo sus pies, el cual le sacudía todas las estanterías con versiones en prensa y redes sociales de que ya había entregado su renuncia y dejaría la Fiscalía a fin de mes, decidió comprar de nuevo su puesto, apareciendo con nada menos que dos mil millones de pesos, en la conferencia de prensa mañanera de López Obrador.

En la extinta PGR, se sabía que había delegaciones que se compraban con unos 30 millones de pesos. Si durante la administración de Mancera en la Ciudad de México se denunciaba una y otra vez que el sindicato de bomberos, dirigido por Ismael Figueroa, vendía plazas en más de 200 mil pesos, calcule usted lo que puede costar un puesto que es una pieza clave para combatir al narcotráfico, o bien, para para recaudar dinero de esas redes criminales.

No es novedad que en muchos lugares se venden plazas de trabajo, incluso en muchos institutos políticos. El PRD lo ha hecho muchas veces con puestos de trabajo grandes y pequeños en el gobierno de la Ciudad de México. Un acuerdo semejante mantiene a Manuel Bartlett impune y en su puesto, debido al financiamiento otorgado en sucesivas campañas presidenciales de López Obrador.

El caso de Gertz Manero es otra variante del mismo tipo de acuerdos. Sin que nadie se lo pidiera seguramente, y no como acto de corrupción sino como “acto de buena voluntad”, el Fiscal General de la República llegó a la conferencia de prensa mañanera con dos mil millones de pesos, sin explicar el origen jurídico de los fondos, con su donativo para el gobierno de López Obrador, para detener así el enorme sismo que sentía bajo los pies. 

El movimiento telúrico que sacudía a Getz Manero era de grandes proporciones y su epicentro estaba en la reforma judicial que pretendía realizar, de la que negaría su autoría una y otra vez al ver los efectos que generó en la opinión pública e incluso entre los legisladores de Morena. 

Gertz Manero, entre otras cosas, pretendía quitar la figura legal del feminicidio. Es decir, ante el aumento feminicidios, el Fiscal General de la República pretendía resolver el problema quitando esa figura legal. Desde el ciudadano común hay que agradecer que Gertz Manero no se pusiera más creativo, porque si no, para terminar con la delincuencia en México, tiraba todo el código penal a la basura y entonces ya no había más delitos. Algo a lo que no se atrevería ni el Chavo del 8. 

Los desatinos de Gertz Manero se pueden ir desgranando en cada paso que hace. La periodista y columnista Ivonne Melgar, consignó en su cuenta de twitter (@ivonnemelgar) las siguientes palabras de Gert Manero en la Cámara de Diputados:  

“El fiscal Gertz confesó a las diputadas: No tienen uds. idea lo que es recibir el impacto de la delincuencia organizada, de lo que está sucediendo todos los días. Produce una angustia profunda. No solamente que no está saliendo bien, sino que está saliendo mal. Nos preocupa".

El problema no es que la situación delictiva, de inseguridad y de violencia sea terrible, el problema es que está confesando que sobre este tema, vital para la seguridad, y la supervivencia de los ciudadanos, en la práctica, no saben que hacer.  Al menos no dice tener otros datos. Al menos dice las cosas como son. 

Sobre la reforma judicial, se requiere un gran debate nacional, donde se privilegie el sentido común, que es en realidad la base del derecho, y no las corrientes políticas de moda. Un debate donde los principales bandos, los garantistas por un lado, y los represores por el otro, no tiren de la cuerda cada uno por su lado, sino en favor de los ciudadanos.

Los garantistas hicieron la reforma que se plasmó en el Sistema Penal Acusatorio, que ha fallado de cabo a rabo. Quienes dicen que no ha funcionado porque los Ministerios Públicos y demás funcionarios no están entrenados para su utilización, en realidad no se han asomado ni a ver cuáles son las garantías que este sistema ofrece a los delincuentes, por encima de las víctimas, y que permite entre otras cosas la puerta giratoria que tanto enerva a la ciudadanía, y que hace que un delincuente pueda salir tranquilamente, por cualquier error en el procedimiento. como ha sucedido múltiples veces en la Ciudad de México con los integrantes de la Unión de Tepito.

¿Sabía usted, por ejemplo que con el nuevo sistema penal acusatorio, si usted demanda a alguien por la vía civil, tiene que llevar un juego completo de copias de su demanda, incluyendo todas las pruebas presentadas, para que se las envíen al demandado, a su domicilio, para que las pueda estudiar antes de asistir a la citación correspondiente en tribunales? Algo de locos.

Es decir, el demandado, puede leer la demanda suya en su casa, tomando cerveza, con los pies sobre la mesa, porque si lo citan directamente con su abogado en tribunales, lo están molestando, o le pueden causas molestias. 

¿Sabía usted que en el Código Penal Federal el acusado no está obligado a decir la verdad en su declaración o en sus declaraciones? Claro, de lo contrario dejaría de ser una justicia a favor de la impunidad y podría dejar mal parados a los delincuentes. 

El Código Penal de los Estados Unidos, como el de la mayoría de los países, castiga también la falsedad, es decir, la mentira, especialmente en la declaración del acusado.

En Estados Unidos si el acusado o procesado miente, ya tiene garantizado en 50% una sentencia condenatoria. En México no. Según el Código Penal el testigo o los testigos están obligados a decir la verdad, el denunciante también, pero el acusado no. Algo que si no fuera una tragedia sería para reír. 

¿Sabía usted por ejemplo que figuras jurídicas como la obstrucción de la justicia, como tal, no existen en México? O por ejemplo, ¿que la figura legal que en otros países se conoce como “defensa de un tercero” tampoco existe en México? La defensa de un tercero funciona en otros países como la defensa propia, y quiere decir que si usted ve a una víctima de agresión, por ejemplo a una mujer a la que la están golpeando, y usted la defiende y golpea al agresor, se le puede considerar como defensa propia, como si el agresor estuviera golpeándolo a usted. 

Estos casos constituyen ejemplos, nada más, para hacer notar que en realidad sobre la reforma judicial hay mucho que debatir, que es fundamental y necesaria, y que quienes dicen que no hacen falta más leyes y nada más hace falta que se cumplan, no saben ni lo que hablan. Pero aparecen como expertas o expertos en el tema en programas de televisión hablando con total solvencia. 

Otro mal tremendo para llegar a una reforma judicial necesaria, son los garantistas, que se postulan como defensores de los buenos, de los derechos humanos, y en realidad terminan obteniendo privilegios para los delincuentes. 

El garantismo constituye toda una corriente de moda vinculada al populismo de izquierda o al socialismo del siglo XXI. Un ejemplo extremo de un juez garantista, es el argentino Eugenio Zafaroni, profesor de derecho y ex miembro de la Suprema Corte en Argentina. Según doctrina penal, en el caso de abuso sexual con acceso carnal a una mujer, el juez sostiene que si no había luz, no se puede considerar que hubo violación. Un planteo de locos. 

El Sistema Penal Acusatorio tiene muchos reparos hasta para citar a alguien, porque “puede ocasionar molestias”, le dicen en el Ministerio Público. Así que si usted denuncia a un delincuente, tiene que llevar las pruebas y casi debe usted hacer la investigación, antes de que citen al denunciado para que no lo vayan a molestar. 

Sí, hay una porquería judicial se llama Sistema penal Acusatorio. Por lo mismo, es necesario un gran debate nacional sobre la reforma judicial para terminar con la impunidad en México. Ahora bien, la reforma tampoco puede ser la que se le adjudica a Gertz Manero, que él dice que no promovió y que cercena derechos fundamentales a las libertades individuales, e incluso es violatoria de los derechos humanos en varios aspectos. 

Con respeto los dos mil millones de pesos con los que Gertz Manero apareció en la conferencia de prensa de López Obrador, el Fiscal General no se dijo si ese dinero fue incautado por un juez, si es parte de un trato, si es una devolución o el pago de alguna empresa para no recibir una pena mayor. 

El caso tiene que ver con una investigación abierta, por lo cual el Fiscal puede argumentar perfectamente que por el secreto de sumario no puede ofrecer los detalles. ¿Y a quién que aparezca con dos mil millones de pesos se le dice que no? Y menos en el gobierno de la 4a transformación.

El caso se deriva de una investigación abierta por irregularidades en el INFONAVIT, durante el sexenio anterior. Todo vinculado al Fondo llamado Fibra Uno. Los pormenores del origen de los dos mil millones los dio a conocer el columnista Salvador García Soto, en el Periódico El Universal, en su columna Serpientes y Escaleras, este miércoles 12 de febrero. 

https://www.eluniversal.com.mx/opinion/salvador-garcia-soto/el-caso-de-los-2-mil-millones-de-gertz

Pero como si todo esto fuera poco, el presidente López Obrador anunciaría que esos dos mil millones de pesos, conseguidos por Gertz Manero, se destinarían para pagar los premios de la rifa del avión presidencial, en la que no se rifará ningún avión presidencial. 

Además, la rifa será en septiembre, y en redes sociales preguntan a viva voz a López Obrador por qué no destinar esos recursos para medicinas y equipos en los hospitales directamente, en vez utilizarla para pagar los premios de una rifa cuyo objetivo es recaudar fondos para la compra de medicinas y equipos para hospitales.

Bueno, las respuestas son múltiples. Por un lado, porque está claro que a López Obrador no le importan los enfermos, ni la salud de los mexicanos en general, aunque en el discurso diga lo que quiera. En segundo lugar, porque siempre ha vivido del show, y no sabe sustituir el show por la solución a problemas reales. En tercer lugar, porque a la hora de los caprichos López Obrador no repara en gastos, y parece creer que para eso tiene presupuesto ilimitado, como sucedió con la cancelación del Aeropuerto de Texcoco, aunque saldrá más cara la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, en caso de que en realidad se pueda terminar y sirva para lo que se propone, que haber terminado de construir el aeropuerto de Texcoco.

Así, la cuarta transformación se va convirtiendo en una tragicomedia, de la que López Obrador es su principal actor y protagonista. Un actor principal que parece concebir que puede hacer todo a sus anchas desde Palacio Nacional, pues para ello llegó allí, incluyendo caprichos que cuesten vidas humanas y que paguen los contribuyentes.

Qué ejemplo más claro de su prioridades de gobierno que su solicitud de que los feminicidios no distraigan de la rifa del avión presidencial.

Gertz Manero

 

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