'Suficiente': Tratado escénico sobre la adolescencia
Por Jesús Delgado
La obra de teatro Suficiente presenta a una sociedad distópica mexicana en la que, en pleno año 2038, existe un programa gubernamental llamado Jóvenes para el futuro, que guía a los adolescentes hacia la vida adulta, pero interviniendo en su capacidad de tomar decisiones, coartando su identidad y restringiendo sus impulsos, generando en ellos infelicidad y frustración. Los jóvenes, que están aprendiendo a vivir y apenas empiezan a conocerse a sí mismos, no pueden confiar en su familia, ni en la escuela, y mucho menos en el gobierno, porque cada uno pretende educarlos con base a lo que conocen o ignoran, sin respetar su individualidad, lo que siempre resultará limitado.
Este proyecto parte de una historia original, escrita por Aída del Río, quien también está a cargo de la dirección escénica, a partir de un proceso de improvisaciones y exploraciones con adolescentes y estudiantes de actuación. En esta etapa participó también la psicóloga Claudia Chuff González, quien en su ejercicio profesional detectó que con una alarmante frecuencia los padres hacen daño a sus hijos sin proponérselo, generando heridas difíciles de sanar durante la crianza, lo que la motivó a producir esta obra de teatro.
El origen de la obra es importante para su efectividad, ya que el espíritu y razón del montaje es realmente loable y se evidencia en el escenario, al profundizar en un tema sobre el que necesitamos reflexionar como sociedad: ¿Cómo participamos en la formación de los adolescentes? ¿Cómo estamos educando a los jóvenes? ¿Realmente contribuimos a que se conviertan en adultos felices, plenos y realizados?
Es precisamente durante la adolescencia en el que los seres humanos nos desarrollamos, formando nuestra personalidad y carácter, cuando fortalecemos nuestra identidad, asumimos nuestra vocación profesional, orientación sexual, entre otras importantes decisiones y revelaciones que experimentamos y que van a ser cruciales para el resto de nuestras vidas.
Suficiente es efectiva para representar el conflicto de personajes entrañables y bien definidos durante ese paso a la vida adulta, en el que están lidiando con sus cuerpos en crecimiento y con intensos sentimientos, temores y deseos que apenas pueden controlar, todo bullendo en una existencia en la que son tan vulnerables como lo fueron en sus primeras edades. La obra también nos muestra a los padres de los personajes, en participaciones grabadas por actores invitados y que son proyectadas, que en su mayoría creen estar haciendo un trabajo impecable con sus hijos, pero que descubrimos que nada más lejos de la realidad.
Con frecuencia los personajes de los progenitores exigen, reprenden, ofenden, imponen, cuestionan, pero no escuchan ni aceptan a sus hijos como seres humanos distintos y merecedores tanto de respeto como de confianza. Lo cual genera numerosas reflexiones en la audiencia, que parece conectar intelectual y emocionalmente con la trama, lo cual demuestra el gran logro de todo el equipo encabezado por Aída y Claudia.
Suficiente cuenta con un elenco talentoso y disciplinado de jóvenes actores que llevan la obra en hombros y encarnan a personajes vulnerables, que al culminar la función sentimos que conocemos y con los que hemos empatizado en todo momento, ellos son: Rodrigo Olguín, Fabiola Villalpando, María Ibarra Paleta, Mario González, Michel Santré, Daniela Sánchez, Javier Tascón, María Alanis, Mónica de Lara, Hibert Lara, Andrea de Gré y Mercedes Gutiérrez.
Los puntos fuertes de la propuesta, que son la mayoría, serían tanto la formulación de la idea, la conceptualización de la dirección, las partituras de movimientos, la producción, musicalización, iluminación, escenografía, como la dirección actoral y el desempeño de cada uno de los histriones. Mientras que identificamos que pudieran reforzarse algunos aspectos del texto, el trazo y el ritmo, ya que por momentos se percibe un estancamiento en la evolución de la trama que puede hacer perder la atención de los espectadores y que, siendo un montaje con tres horas de duración, es un aspecto de no menor importancia.
El diseño escenográfico y de utilería está a cargo de Iván Sotelo, mientras que Norberto Reyes se encarga del diseño audiovisual, Jorge Martínez del diseño sonoro, María Vergara de la iluminación y Mariana Almazzi y Mario González del diseño de vestuario.
En conclusión, Suficiente es una obra teatral de grandes dimensiones, tanto por el esfuerzo mayúsculo evidenciado en su producción, como por la comunicación de ideas relevantes y la transmisión de emociones profundas que seguirán resonando en muchos de los espectadores que se han dado cita en el Teatro Xola de la Ciudad de México, los martes a las 8:00pm, en cada función de esta temporada que ha resultado muy exitosa y que culminará el próximo martes 9 de julio. No deje de verla.
