Dicta ONU medidas cautelares a México por caso del Rancho Izaguirre en Jalisco
Redacción
Ciudad de México. - El Comité contra la Desaparición Forzada (CDF) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dictó medidas cautelares al Estado mexicano por el caso del Rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco.
Lo anterior se dio en respuesta a una solicitud presentada por la organización Solidaria y la Plataforma por la Paz y la Justicia en Guanajuato, en nombre de colectivos que buscan preservar las evidencias halladas y evitar su daño, pérdida o desaparición.
Deberán garantizar resguardo y acceso a la información
En un comunicado se señaló que las medidas cautelares implican que las autoridades mexicanas deberán resguardar correctamente lo encontrado en el predio, así como garantizar el acceso a la información, la participación y la protección de los familiares de personas desaparecidas.
Asimismo que se presentaron 18 casos ante el Comité. Argumentaron que las medidas interesan a todos los colectivos y familias de personas desaparecidas en tanto no exista una investigación que permita identificar plenamente los restos y objetos hallados.
“Argumentamos que dichas medidas son de interés de todos los colectivos y de todas las personas desaparecidas en tanto no exista una investigación exhaustiva que identifique los restos encontrados y los objetos personales con sus respectivos dueños. Mientras no sea así, cualquier persona desaparecida y cualquier colectivo de familiares tiene interés de confirmar o descartar los hallazgos”, se puntualizó.
Análisis e identificación de restos y contexto
Las medidas dictadas también implican que el Estado mexicano deberá analizar exhaustivamente los objetos personales localizados y determinar si pertenecen a personas desaparecidas.
Además, se deberá realizar un análisis de contexto para identificar patrones, motivos, el modus operandi de los perpetradores, los perfiles de las víctimas y las particularidades regionales vinculadas a los casos de desaparición.
El Comité de la ONU expresó su preocupación por las alegaciones sobre el “riesgo de daño irreparable a los restos óseos y elementos probatorios localizados en el rancho Izaguirre”.
