EU evaluará méritos de reforma electoral, por ahora no toca tema: Ebrard

Ciudad de México.- Los socios comerciales de México en Estados Unidos no han externado, hasta ahora, preocupación por falta de certeza jurídica y desconfianza empresarial en torno al futuro del país por la reforma judicial, señaló el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubón.
Durante la Reunión Nacional de Consejeros Regionales (RNCR) 2025 de BBVA México en la capital del país, el funcionario federal dijo que el tema de los comicios judiciales del 1 de junio no ha estado presente en los diálogos con los estadounidenses en el marco de la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), tras el inicio de la guerra arancelaria que de Donald Trump desde su regreso a la Casa Blanca.
“Lo que me han dicho (...) es, ‘la vamos a evaluar por sus méritos; no nos interesa influir en contra (...) Lo que vamos a ver para fijar un punto de vista, es esperar en qué termina, y en función de eso ya te daremos un punto de vista o una preocupación… Es una posición pragmática y van a ver si funciona”, aseveró.
Papel estratégico en nuevo orden comercial global
Ebrard Casaubón aseguró que México se encamina a jugar un papel estratégico en un nuevo orden comercial global liderado por Estados Unidos, en el que la relocalización de industrias y el fortalecimiento de cadenas regionales consolidan al país como el socio mejor posicionado frente al mercado más grande del mundo.
Sostuvo que Norteamérica vive una reconfiguración acelerada de sus relaciones económicas, impulsada por la necesidad de Estados Unidos de reducir su dependencia de Asia, en especial de China, en sectores clave como farmacéutica, semiconductores, tecnología médica y electromovilidad.
“Vamos a ver un esfuerzo sin precedentes para generar la relocalización en campos donde es vital reducir la dependencia respecto a Asia”, afirmó.
Señaló que, mientras Estados Unidos importa casi 300 mil millones de dólares en productos farmacéuticos, México apenas exporta mil millones, lo que representa una oportunidad enorme.
En este contexto, subrayó que México es el único país con el que Estados Unidos mantiene superávit comercial en acero, y que cerca de 90% del comercio bilateral fluye sin aranceles, una ventaja sin comparación entre los tratados firmados por Washington.
Ebrard también reconoció que el gobierno mexicano ha tenido como una de sus principales preocupaciones evitar una confrontación innecesaria con Estados Unidos, mantener un diálogo firme y alinear su política económica a la nueva realidad regional.
“La realidad es que la integración entre México y Estados Unidos es de tal tamaño que los beneficios de ambas partes son tan grandes que esto ha jugado un rol favorable a los intereses de México y Estados Unidos de largo plazo”, apuntó.
El funcionario destacó que México debe actuar con rapidez para aprovechar esta ventana histórica e incluso mencionó que la inversión extranjera directa podría duplicarse de aprovechar las ventajas de la relocalización de las cadenas de proveeduría globales.
“Esto puede significar duplicar la inversión extranjera directa de México. Quizás más. Depende qué hagamos, qué acordemos y cómo participamos”, concluyó.
Sobre las importaciones provenientes de Asia, particularmente de China y Vietnam, el funcionario detalló que se han intensificado las inspecciones y sanciones a empresas importadoras que operan de forma irregular, incluso cancelando registros y congelando cuentas.
En este sentido, Ebrard explicó que “no es un tema contra China o Vietnam”, sino contra quienes vulneran buscan utilizar al país para llegar al mercado estadounidense, lo cual añadió, “pone en riesgo” la credibilidad.

