Ciudad de México.- Javier Sicilia Zardain y personas de la familia LeBarón, que encabezaron la denominada “Caminata por la Verdad, Paz y Justicia”, manifestaron su negativa para entrevistarse con funcionarios del gabinete de seguridad, quienes los esperaban en Palacio Nacional, pues comentaron, “no tiene nada que ver con nuestra agenda”.
Luego de tres días de marcha, la cual salió de la Glorieta de la Paloma de la Paz, en la zona norte de Cuernavaca, Morelos, Sicilia Zardain indicó que “no tenemos nada que hablar con el gabinete de seguridad”.
Marcharon desde la Estela de Luz
A partir de las 10:00 horas, los manifestantes se congregaron en la Estela de Luz, desde donde caminaron por Reforma para incorporarse a Avenida Juárez para llegar a Palacio Nacional.
Previo a su salida, el también activista, Julián LeBarón, consideró que la manifestación es un mensaje de apoyo y unión para el presidente de México para así atender juntos la problemática de inseguridad.
A la altura de la glorieta de la Diana, sobre avenida Reforma, los LeBarón y Sicilia Zardain se quitaron un zapato para continuar su trayecto descalzos, esto en honor a Mackenzie, la niña de 9 años que con un solo zapato caminó para buscar ayuda luego del ataque perpetrado contra su familia en Bavispe, Sonora, el pasado 4 de noviembre, donde fallecieron 9 personas, entre ellas, seis menores de edad.
Momentos antes de que la caravana llegara al Zócalo, presuntos simpatizantes del presidente Andrés Manuel López Obrador los agredieron. Con gritos como “¡traidores!” y “Es un honor estar con Obrador”, los ruidosos le hicieron frente a la movilización y trataron de impedir que avanzará a Palacio Nacional.
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Pero cerca de las 13:30 horas, llegaron al Zócalo, donde Sicilia Zardain indicó que este gobierno federal redujo "al drama y la tragedia humanitaria de esta nación a un asunto de balas y aun tema de seguridad con abrazos".
En un templete, desde donde dio lectura a una carta que, minutos después fue entregada a las autoridades federales, el poeta y activista subrayó que tanto él como los miembros de la familia LeBarón no tienen por qué ingresar a Palacio Nacional.
Señaló que parte de las propuestas están encaminadas a que haya una respuesta efectiva para los problemas de la violencia e inseguridad que padece México.
PIDEN RECONCILIACIÓN
Por su parte, el también activista, Adrián LeBarón, tomó la palabra y pidió a las autoridades federales a que haya una reconciliación, luego de que un grupo de manifestantes los recibió con consignas he insultos a hacia su familia y al movimiento.
"No somos chairos, ni fifís, ni conservadores, ni de la izquierda. Somos seres humanos luchando por vivir”, externó el mormón.
También condenó que el presidente Andrés Manuel López Obrador no los haya querido recibir, por lo que, dijo, las muertes que haya en el país no son un “show”.
Al culminar el mensaje, una comisión de los manifestantes entregó la misiva en la entrada de Palacio Nacional, la cual fue recibida por la titular de la Unidad de Atención Ciudadana de la Presidencia de la República, Leticia Ramírez Amaya.
De acuerdo con diversos medios, al interior del recinto se encontraban la secretaria de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero y el titular de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo Montaño.
IMCM
