Por Nadia Alcázar
Hidalgo.- La tarde de ayer se registró una explosión en una toma clandestina de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) en el municipio de Tlalhuelilpan, Hidalgo, la cual dejó al menos 66 muertos y 76 heridos.
El incidente se convirtió rápidamente en una tragedia nacional, por la magnitud de explosión y sus consecuencias, así como por la lucha que ha encabezado el presidente Andrés Manuel López Obrador en contra del robo de combustible, conocido como huachicoleo.
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Sin embargo, otro hecho que ha llamado la atención es el ambiente que se vivía en el ducto antes de la explosión; ya que había familias enteras, militares y personas que se burlaban de las autoridades.
En redes sociales han surgido dos videos, que supuestamente muestran cómo era la situación antes del siniestro.
Ojo a este video donde pobladores de llevaban el combustible...antes de la explosión en #Tlahuelilpan pic.twitter.com/yvh0DHnJbP
— Salvador Zaragoza A. (@SalvadorZA) 19 de enero de 2019
En una de las grabaciones, se puede observar la presencia de elementos de la Policía Federal y del Ejército, quienes vigilan la zona y observan cómo la gente se roba el combustible sin tratar de detenerlos.
Ante la situación el secretario de Defensa, Luis Crescencio Sandoval, aclaró que los uniformados se vieron rebasados debido a que había entre 600 y 800 personas en el lugar.
"Al verse rebasados por la cantidad de gente que llegaba con sus recipientes, [las autoridades en la zona] buscaron no tener una confrontación y quedaron a un lado"
Mientras que, en un segundo video, la persona que lo graba se burla de que se siguen robando el combustible, a pesar de la lucha contra el huachicoleo: “Pa’que no les cuentes putos… Aquí estamos”.
También se cuenta con el testimonio de la reportera Joselyn Sánchez, de AM Hidalgo; que publicó el primer video de la tragedia, en el cual se puede ver la situación poco después de la explosión.
Sánchez, de 30 años, explicó que ella acudió al ducto por el reporte que le hizo un amigo y cuando llegó encontró a familias, con niños y adolescentes, recolectando combustible en todo tipo de recipientes.
“Alguien picó el ducto y empezó a salir un chorro, esa fuente, pues; se empezó a alzar”.
Todas las personas se divertían, se mojaban con gasolina y bromeaban sobre el asunto; por suerte la reportera decidió de alejarse del lugar por el fuerte olor a gasolina que impregnaba el aire y hacía vomitar a algunas personas; relató para El Universal.
“Había muchas personas que se acercaban con garrafones, había mujeres, niños, adolescentes. De hecho, se acercaban a 'la fuente' hasta en camionetas para poder cargar. Y empezaron a jugar, a hacer borlote en donde estaba brotando el hidrocarburo; brincaban, se reían y echaban relajo. Se mojaban y les parecía gracioso, mucha gente se estaba mojando con la gasolina”.
