Por: Jania Pereyra Carrillo
El hombre, eje de la creación, ha representado siempre una interrogante para sí mismo. Su lucha constante con los ideales y las dudas de su existencia lo han llevado a plantear preguntas de las que tal vez nunca tenga respuestas. ¿Cómo resulta entonces, que su condición frágil y limitada se ha convertido, con el paso de los años, en su principal soporte? ¿Qué los motiva a tener sueños y trascender en el plano terrenal?
Prometeo Vencedor, es una breve obra de teatro, que trata dentro de su texto algunos temás existenciales, inertes de los seres humanos y su condición natural, moral y espiritual.
Se trata de un diálogo filosófico entre Perseo, Satanás y Saturnino, junto con algunos intermediarios, que intentarán discutir de manera profunda, algunas interrogantes sobre la intención y el destino de la humanidad.
¿Qué es lo que realmente importa en la vida? Y ¿Por qué no hemos sido capaces de liberarnos del dolor y de todo lo que hemos considerado malo? José Vasconcelos, plasma en este guión corto una serie de suposiciones por parte de cada personaje, que invitan al lector a la reflexión de cada respuesta.
Prometeo conversa sobre el sufrimiento fecundo y el goce estéril, la muerte y la procreación, el propósito de los hombres; pero sobre todo de la escencia que los motiva a seguir en un mundo que carece de atributos para el libre ejercicio de la conciencia, que según Prometo es el secreto para la creación de un ser asoluto.
Con ayuda de una figura mítica, Vasconcelos nos regala un profundo análisis, en el que el equilibrio y las vivencias humanas ponen a Prometeo como intermediario de una lucha moderna de contradicciones y falsas creencias; para confrontar lo natural con lo divino.
La voluntad de vivir no ha sido aniquilada, lo sabremos porque las campanas no dejan de replicar allá en lo alto, y porque todo lo que arde simpre conquistará a la luz, de entre las tieniblas.
Sobre el Autor:
José vasconcelos fue un abogado, político, escritor, educador, funcionario público y filósofo mexicano. Fue el fundador del Ministerio de Educación en el país, desde el cual desarrolló una fecunda y extraordinaria labor, lo que le mereció el sobrenombre de “El maestro de la juventud de América”.
Fuente:
Vasconcelos Calderon, jose (2009). Prometeo Vencedor: Tragedia Moderna, Editorial Trillas.
