Nunca hubo desaparición de Rocío Mendoza de Ayala: Comisión de Búsqueda
Redacción
Ciudad de México.- La Comisión de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México aclaró la presunta alerta de desaparición que circuló sobre Rocío Mendoza de Ayala.
En un comunicado, el organismo sostuvo que tras una recopilación exhaustiva de información, se determinó que la alerta es falsa y que la persona mencionada no se encuentra desaparecida.
Según los datos recabados por esta autoridad, la ficha de búsqueda difundida no posee ningún folio oficial emitido por la Comisión de Búsqueda ni la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) o Locatel.
Por ello, subrayó que este detalle es crucial para identificar la autenticidad de este tipo de comunicaciones.
Además, la Comisión aseveró que logró establecer comunicación directa con la persona cuya imagen aparecía en el boletín falso. Ella manifestó no estar desaparecida y que su fotografía fue utilizada sin su consentimiento para la creación y difusión de dicha alerta apócrifa.
La Comisión de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México aprovechó este incidente para recordar a la sociedad la importancia de verificar las fuentes de este tipo de información.
Subrayaron que los boletines oficiales de búsqueda y localización se difunden únicamente a través de sus redes sociales oficiales. Esta medida busca asegurar que la información sensible relacionada con personas desaparecidas provenga de canales confiables y evitar la propagación de datos erróneos que puedan generar confusión o alarma innecesaria.
TODO FUE FALSO
La supuesta desaparición de Rocío Mendoza de Ayala, de 30 años, generó un intenso debate, luego que supuestos familiares y amigos reportaran su ausencia desde el pasado 29 de julio.
Según el relato de “Yosahandi”, una supuesta amiga cercana de Rocío Mendoza de Ayala, esta fue vista por última vez en Parque Tezontle, alcaldía Iztapalapa, alrededor de las 17:30 horas.
“Yosahandi” afirmó que Rocío fue observada "inconsciente y tambaleante" de la mano de dos hombres antes de ser subida a una camioneta negra.
IMCM