Los Estados Divididos de América
Por Francisco X. López
En 2016, la batalla por la presidencia de los Estados Unidos estaba en su momento más crítico. Por un lado, Hillary Clinton representando a la izquierda neoliberal y por elotro, Donald Trump alimentándose de los rencores de la población blanca y de ultra derecha.
En este contexto, Howard Chaykin concibió Divide States of Hysteria, una reinterpretación violenta y cínica de lo que sucede tras el telón de los juegos políticos. La historia inicia con el asesinato del presidente y su gabinete, tras lo cual una senadora queda al frente del pais. Esta mujer notiene idea de lo que está haciendo y su carrera política guarda más de un sucio secreto.
Ante la falta de autoridad, un ataque terrorista destruye Manhattan, con una serie de pequeñas bombas nucleares y un agente caído en desgracia reúne a un equipo de convictos para descubrir a los autores de esta tragedia.
El argumento y los personajes son bastante comunes y pueden pareces clichés, pero lo que realmente hace el autor, es escupir en la cara del lector las atrocidades del gobierno, los organismos de poder y las grandes corporaciones, además de mostrar la gran mentira que son los Estados Unidos.
Un país dividido en mucho más que sólo dos bandos y para el cual las apariencias son lo principal. Redes de contrabando, prostitución y crimen generan ríos de dinero, que permite a las élites mantenerse en el poder mientras la población se “Balcaniza” en grupos ideológicos, raciales y económicos, cada uno peleando por una supremacía a la cual se creen merecedores.
A lo largo de seis números, Chaykin va presentando una realidad en la cual un billonario extranjero manipula a la población y a los medios para obtener ganancias inimaginables, mientras los rivales políticos están más preocupados por mantener sus privilegios y excesos. Todo esto mientras se inundan las redes y los medios de información y opiniones que ocultan, a simple vista, la verdadera guerra que se vive en el país, una guerra civil en la que el enemigo es cualquiera que no se vea y no piense como el otro.
En su momento, el cómic fue criticado y atacado por su presentación explícita de violencia y crímenes de odio, como si una obra que comenzó vendiendo 16 mil ejemplares y terminó desplazando apenas arriba de los 5 mil fuera una amenaza para la democracia y la cultura del país de las libertades.
Después de su publicación y ante los visto la semana pasada en Washington D.C. es apropiado conocer esta seríe, que actualmente es sólo un dato, al margen de las controversias generadas por el cómic a los largo de los años, pero que nos ofrece una visión aguda y una denuncia de lo que como sociedad vemos y también decidimos no ver.
Estimados lectores, ¿Qué es más atroz? ¿Una portada presentando una versión sarcástica de la realidad o que las imágenes que todos vimos en la televisón y las redes terminaran siendo material de memes, mientras el futbol y los pleitos de la farándula parecen estar en el primer lugar de nuestras prioridades?
La serie esta disponible en todas las plataformas digitales.