Espada de Dos Manos
Columna de Opinión
Autor: Marcelo Fabián Monges
Escritor y periodista
Lunes 24 de abril de 2023
México necesita la realización de un foro que le permita a la mayoría de los mexicanos conocer las propuestas de los distintos aspirantes a ser el candidato o la candidata a la presidencia de la República en el 2024, de parte de la Alianza opositora.
Este foro debería ser la base para que la inmensa mayoría de los mexicanos, es decir, todos los que votan en el padrón electoral, pueden elegir un candidato o candidata ciudadana, libremente, mediante el voto popular, en un ejercicio organizado por el Instituto Nacional Electoral.
Esta forma de elección del candidato de la Alianza Opositora para enfrentar a Morena en el 2024, será la única que le dará legitimidad a la candidatura de la Alianza PAN, PRI, PRD, para competir por la presidencia de la República en junio de 2024.
Cualquier otro método de selección del candidato o candidata, sea mediante una encuesta, un acuerdo de cúpulas o acuerdo entre partidos, etcétera, lo que hará es mostrar que en realidad la oposición de fondo es igual que Morena. Se dirán distinto, pero son lo mismo, si la elección de su candidato a la presidencia no se realiza mediante el voto directo de la ciudadanía.
Si el candidato o la candidata de la Alianza opositora no se realiza por voto directo, se les dirá a los candidatos que la casa encuestadora es seria, que esto o lo otro, pero al final se los habrán llevado al río a la mayoría de ellos. Ganará el que les garantice los mejores negocios al grupo de Claudio X. González y los demás habrán quedado vestidos y alborotados.
Fue Silvano Aureoles quién pidió que se emplee este método, durante el foro organizado por “Unidos para Mejorar”, que funcionó, casi con un carácter exclusivo, los días 17 y 18 de abril pasado.
También para realizar este foro, como lo que viene en el camino a la presidencia para el 2024, la oposición y quienes organizan la Alianza, es decir el grupo de Claudio X. González, deberán acelerar el paso. En primer lugar, porque falta poco para las elecciones presidenciales. Falta solo un año y dos meses. Y hay que tener en cuenta que Morena tiene a sus “corcholatas” haciendo campaña por todo el país desde ya hace mucho tiempo. En este sentido, el candidato o la candidata de la Alianza van largando tarde, muy tarde.
Hay que saber mirar que el grupo que articula la Alianza, es decir el grupo de Claudio X. González, se apresta a “entrar en la contienda” jugando como la Selección Mexicana de Fútbol. Al seleccionado nacional de fútbol lo caracteriza una mentalidad, y es que se contenta con participar del Mundial de Fútbol. Digamos, no es precisamente una mentalidad ganadora. No hará sus mayores esfuerzos ni dejará el alma y el corazón en la cancha. Así ha venido jugando la Alianza Opositora en las diferentes contiendas electorales en los distintos estados del país. Por eso, López Obrador y Morena a lo largo de estos cuatro años, han seguido sumando gubernaturas. Pero ya explicaremos de manera más detallada esta mentalidad en otra entrega de esta columna. Tampoco desde la Alianza opositora se han hecho durante estos cuatro años grandes esfuerzos por quitarle la agenda pública de las manos a López Obrador. Ni se han organizado movimientos de resistencias a las desquiciadas políticas del habitante de Palacio Nacional, antes de la marcha del 13 de noviembre en defensa del INE. Es hora de terminar con esa mentalidad. Es hora de apretar el acelerador y de que la Alianza sociedad civil, más PAN, PRI, y PRD, jueguen de verdad para poder ganar en la elección del 2024.
Para esto, una de las premisas que hay que tener en cuenta es que si uno pertenece a la sociedad civil, esta no va detrás de los políticos. Va delante de los políticos. Una sociedad civil que va detrás de los políticos es una comparsa de estos, no es ninguna sociedad civil. Alguien le debería explicar al grupo de Claudio X. González que es la sociedad civil la que le tiene que marcar el camino a los políticos, decirles por dónde, exigirles lo que les hace falta, como decirle por ejemplo cuándo presentar sus propuestas para que la población general de México, toda la sociedad, pueda verlos, escucharlos, y elegir de entre ellos al mejor o a la mejor candidata.
El grupo que articula al Alianza, se ha retrasado en esto, mucho más de lo conveniente.
Es también la sociedad civil, si se quiere elegir un candidato único desde este ámbito, quién debe decirles a los aspirantes a candidatos cómo será la forma y el ejercicio para que puedan presentar sus propuestas, y para que las pueda ver todo México.
En esto también hay que considerar que este debe ser un “ejercicio” que pueda ver toda la sociedad mexicana. Según los datos del INE, la lista nominal de electores al día de hoy es de 95 millones, 258 mil, 668 electores. Esto incluye, según el INE, “a toda la población que solicitó su inscripción al Padrón en territorio nacional y extranjero y cuentan ya con su Credencial para Votar vigente.” También según el INE, el padrón electoral está integrado por 96 millones, 846 mil, 806 ciudadanos. Esto comprende a “toda la población que solicitó su inscripción al mismo en territorio nacional y extranjero con la finalidad de obtener su Credencial para Votar con fotografía y así ejercer su al voto”.[1]
[1] INE. Estadísticas Lista Nominal y Padrón Electoral. https://www.ine.mx/credencial/estadisticas-lista-nominal-padron-electoral/
La realización del Foro Opositor hay que tratar de que lo vea toda esa población, porque en el 2024, también hay que tratar de ganar con los votos de Morena. O al menos con los 30 millones de votantes que en el 2018 votaron por López Obrador, o al menos trabajar con los que no son fanáticos y todavía razonan, que seguramente son la mayoría. No apuntarles a ellos, no tratar de sumarlos, es jugar con una mentalidad pequeña, perdedora. Y así no se ganan las grandes contiendas.
Es justamente por esto que desde “Unidos para Mejorar” no se puede volver a organizar un foro con todos los aspirantes a la presidencia de la República, que se trasmita desde una sola cuenta de Twitter, como se hizo en el pasado foro desde la cuenta de la Sociedad Civil México, porque entonces el foro está armado para el lucimiento personal de alguien, o de dos personas. Y lo que está en juego es infinitamente más grande, es nada menos que el futuro y el destino de México.
En este sentido, hay que cambiar el chip y optar por la grandeza. Saber que nadie hace política sin sumar. Nadie gana una elección presidencial desde la pequeñez. Nadie desaloja un monstruo en el poder como es Morena pensando solo en el lucimiento de su pequeño grupito.
Tampoco se puede hacer esto porque es una falta de respeto para los aspirantes a la presidencia de la República. No son ganado. No son reses desfilando para una exposición, para ver quién los compra. Hay que tratarlos con respeto. Y tratarlos con respeto significa varias cosas, en primer lugar, organizar el foro de manera que ellos puedan hacer sus propuestas y estas sean conocidas por toda la ciudadanía. En segundo lugar, que la organización del evento tenga todos los detalles, y el impacto adecuado para que sus propuestas puedan conocerse en los diferentes temas que hacen a los principales problemas del país. Por otro lado, también es una falta de respeto ponerlos juntos a dirigentes impresentables, que por más aspiraciones que tengan, no serán nunca presidentes, de ninguna manera. Y es el caso de Miguel Ángel Mancera, Francisco Cabeza de Vaca y Demetrio Sodi. Alguien debería ser capaz de decírselos.
En este sentido, es válido preguntarse ¿Qué sucede con los senadores del Grupo Plural? Que se supone que son más independientes, Si ellos no les pueden decir a los miembros de la Alianza: oigan, sean serios, ni la ciudadanía, ni todos los mexicanos, ni el resto de los candidatos y candidatas presidenciales merecen que pongan a esos impresentables al lado de los que sí tienen una carrera política decente y por lo mismo sí pueden presentar credenciales como para competir por la presidencia de la República. Cabe preguntarse en este punto, hasta dónde llega la genuflexión en la oposición, que ni el grupo de Claudio X. González, que se supone son la “sociedad civil” ni los políticos que están dentro de la Alianza, tengan el carácter como para decirles: “oigan no jueguen, con esos candidatos no vamos a ir a ningún lado. No le vamos a ganar a ninguna de las corcholatas de López Obrador”.
Si el PRD quiere tener su propio representante entre los aspirantes a la presidencia de la República tiene derecho, pero tiene otras personalidades que pueden competir dignamente por el puesto más alto del país y que tienen muchas tablas políticas, como es el caso de Jesús Ortega y Fernando Belauzarán, por ejemplo. En el caso de Belauzarán, todos sabemos que la última elección fue candidato a diputado por el PAN, pero su origen indiscutible es el PRD y la izquierda. Podríamos decir, aún hay tiempo de que se sumaran aspirantes a la presidencia, pero que no tengan cola que les pisen. Que no vengan cuestionados por corrupción y colusión con el crimen organizado.
El Foro que necesita México de la oposición es uno en el cual cada candidato y candidata puedan presentar sus propuestas en un formato de paneles temáticos, al menos en las siguientes materias:
• Diagnóstico del país
• Relaciones con Estados Unidos
• El problema de la violencia
• Las comunidades indígenas
• La pobreza
• Los organismos autónomos
• Economía
• La inseguridad
• El crimen organizado
• Los desaparecidos
• Política Exterior
• Sistema de salud
• Justicia y Estado de Derecho
• Educación.
• Energías limpias.
• Pemex y CFE
• AIFA Dos Bocas y el Tren Maya
• Cultura
• Impulso al sector privado
• Fomento al deporte
• Estímulo al arte
• Regulación del sector informal
Otra cuestión que debería hacer el grupo organizador del foro, es decir, la gente de Claudio X. González, es solicitarles a los candidatos y a las candidatas que durante el evento, también den a conocer, en una mesa ex profeso para eso, sus respectivos gabinetes con los que gobernarían, al menos en sus principales carteras.
El Foro debería desarrollarse durante al menos dos semanas, en un horario que vaya desde las siete de la tarde hasta las diez u once de la noche. Todos los días. Y que sea transmitido por Milenio Televisión, Imagen Televisión, Foro Tv, El Universal, Excelsior, el Canal Mexiquense, y cuanto medio de comunicación y cuenta de Twitter quiera sumarse a ellos.
De esta forma, la oposición le estaría arrebatando la agenda mediática a López Obrador. Al menos por dos semanas. Si todas las intervenciones de los candidatos y candidatas para dar a conocer sus propuestas no pueden ser desarrolladas en dos semanas, que se haga en tres. La oposición de esta forma se habrá llevado la agenda comunicacional del país y López Obrador quedará hablando solo sus tonterías de todos los días. La atención habrá pasado de lleno a otro lado, al lado de la oposición. Algo que el grupo de Claudio X. González y los partidos de la Alianza no han sabido hacer en estos cuatro años.
López Obrador ha perdido la agenda comunicacional solo en dos momentos de estos cuatro años de su gobierno. El primero fue al comienzo de la pandemia, cuando la población se resguardó en su casa antes de que esto se aconsejara desde el gobierno. Y el segundo, fue con la marcha del 13 de noviembre en defensa del INE, donde López Obrador perdió el quicio y se dedicó a despotricar e insultar como único tema a quienes marchamos ese día.
Realizar un foro de esta naturaleza, con toda propiedad, con todo respeto por los aspirantes a la presidencia de la República por parte de la oposición, organizado de forma que toda la población mexicana pueda oír sus propuestas, ver sus rostros, analizar sus aciertos y sus errores, medir la calidad, las tablas y la experiencia de cada uno de ellos, le darían a la oposición una legitimidad, una profundidad y una penetración en la población que hoy no tienen.
Después de eso, el grupo que articula la Alianza solo le quedaría solicitarle al INE formalmente que organice la elección para que la sociedad en general elija el candidato de la Alianza Opositora.
Antes de ese Foro, el grupo de Claudio X. González, debería hacer un ejercicio con cada uno de los candidatos y candidatas a la presidencia de la República, debería llevarlos a cada uno a un mercado, para ver cómo conectan con la gente común. Y que ese ejercicio tampoco sea privado. Que sea acompañado de los principales medidos de comunicación. El único que se ha atrevido a hacer algo semejante hasta ahora es Enrique de la Madrid. Algo que, al menos como ejercicio, es muy valioso. También deberían llevarlos a cada uno de los aspirantes a una comunidad indígena. Esto con tres objetivos: el primero es que las conozcan. Varios del grupo de Claudio X. González, aunque digan que las conocen, las han visto solo en fotos. El otro es que se enteren de cuáles son los problemas de los grupos más vulnerables de México, cómo viven, y qué necesitan. Y el otro, es ver cómo conectan con esa gente. Porque entre los aspirantes presidenciales hay gente muy capaz, como José Ángel Gurría, que es alguien que sabe mucho, y que seguramente conecta muy bien con los banqueros, con la gente del sector financiero, pero en un mercado o en una comunidad indígena, habría que ver qué pasa. El primer problema que enfrentaría es que seguro allí no lo conocen. Alguien que saldría muy bien librada de todas esas pruebas es Claudia Ruiz Massieu. Y el que se vea que no conecta con la gente, pues ser capaz de irle diciendo ¡muchas gracias! Vamos a tenerlo en cuento para un puesto en el gobierno de coalición.
Pero digamos, es hora de que la oposición se ponga los pantalones largos. Juegue en primera división. Deje de estar jugando para los intereses de un grupo y juegue para el bien de todo México.
Desde luego, no puede ser un foro excluyente. Como lo fue el realizado el 17 y 18 de abril, donde dejaron afuera a la mayoría de las organizaciones de la sociedad civil que convocaron a la marcha del 13 de noviembre y del 26 de febrero. No se gana la presidencia de la República actuando como una secta. La oposición y el grupo que lidera la Alianza deberían repetir como un mantra la palabra “sumar”.
Un foro de esta naturaleza debería ser realizado en el Auditorio Nacional. Con un acuerdo entre los aspirantes a la candidatura a la presidencia de la República que no habrá guerra de porras. No queremos que gane el que grite más fuerte. Esa no es una razón para conducir el país. Esto tiene que tener más altura. Tiene que ser más civilizado que eso. Y de esa forma se podrá mostrar la enorme diferencia de lo que es capaz la oposición en comparación con Morena.
Del resultado de ese foro se tendrán los principales lineamientos para la plataforma política para la campaña del 2024. Algo que la oposición todavía no ha sido capaz de construir.
En este espacio estaremos analizando el perfil de cada candidato y candidata. Así como revisando cómo va el camino de la oposición en su carrera hacia la presidencia en el 2024.
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