Por: Karina Gallardo, analista senior
Hace 50 años la Ley Federal del Trabajo estableció que los trabajadores gozaran de un periodo vacacional de seis días a partir del primer año trabajado, desde entonces la ley no ha cambiado en materia de vacaciones pagadas en lo que lleva vigente, con el impacto que esto ha tenido en los trabajadores.
En ese contexto México es el país que menos días de descanso remunerado concede a sus trabajadores, de los 38 países que componen la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
En nuestro país se le dedica en promedio 48 horas semanales al trabajo, lo que se traduce en que, según datos del IMSS, 75% de los derechohabientes sufre de fatiga por estrés, superando a países como China y Estados Unidos. Es un hecho que un mayor número de horas trabajadas no resulta necesariamente en un aumento de la productividad. En Chile, por ejemplo, se trabaja 1,825 horas al año, mucho menos que en México (2,124 horas), y su productividad es 63% mayor.
El pasado martes 27 de septiembre la Comisión de Trabajo y Previsión Social aprobó por unanimidad una reforma que aumenta a 12 los días de vacaciones anuales que podrán tomar los empleados de empresas públicas y privadas, a partir del primer año laborado.
El proyecto también contempla el incremento anual de 2 días de descanso desde el segundo y hasta el quinto año de labores hasta acumular 20 días de vacaciones; y a partir del sexto año, el periodo de vacaciones aumentará dos días por cada cinco de servicio hasta alcanzar 30 días de descanso, y de ahí hasta llegar a los 32 días de descanso obligatorio. Asimismo, la reforma plantea reducir la jornada laboral diurna de ocho a siete horas y la nocturna de siete a seis horas.
Uno de los cambios más significativos que aborda esta reforma es la de la licencia por paternidad que planea un aumento de cinco a 20 días laborables remunerados.
Por ahora, se espera que la iniciativa se apruebe sin cambios en el pleno del Senado esta misma semana para después llegar a la Cámara de Diputados.
