Qué le depara a México tras las elecciones en EUA

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Por Karina Gallardo, senior analyst

El martes 8 de noviembre los ciudadanos estadounidenses acudieron a las urnas a votar por los 435 escaños del Congreso y 34 de los 100 curules del Senado. Estas elecciones intermedias son consideradas una especie de referéndum al trabajo del presidente Joe Biden, para los primeros dos años de gobierno.

Las casas encuestadoras esperaban que el Partido Republicano arrasara en la Cámara de Representantes, lo que se traduciría en que el partido opositor lograra tener el control total del Congreso y aunque sí lograron ser mayoría, su victoria no fue tan contundente como se esperaba.

Fue una semana de incertidumbre para la política estadounidense, pues hasta el viernes 11 no se tenía claro quién sería mayoría en el Senado. Sin embargo, luego del conteo de votos por correo en el estado de Arizona, el Partido Demócrata aseguraría 50 de los 100 senadores, necesarios para tener el control de la Cámara Baja. Esta mayoría demócrata garantiza al presidente, Joe Biden, una segunda mitad de mandato mucho más tranquila.
 
Pero, ¿cómo afectan estos números a México? De los resultados depende el tono que Estados Unidos dé a la relación con nuestro país. Entre los temas importantes para los estadounidenses están la política energética, el cambio climático y la política exterior; tres de los ejes principales del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y sobre las cuales ha tenido evidentes encontronazos con los encargados de dichas oficinas con su contraparte vecina.

Al ganar el Congreso, el republicano Kevin Mc Carty, un político abiertamente trumpista, queda como presidente de la cámara, de tal manera que, tal como lo hizo en el gobierno de Donald Trump, seguirá presionando para la construcción del muro fronterizo y es probable que México sea el centro de los ataques republicanos los próximos dos años de cara a las elecciones presidenciales.

Ante el control republicano se ejercería mayor presión en el tema de drogas, seguridad, crimen organizado, agricultura e implementación del T-MEC, pero liberaría tensión hacia las energías limpias, lo que daría mayor espacio de negociación al presidente López Obrador para impulsar nuevamente su reforma eléctrica.

Con los resultados obtenidos por los demócratas en el Senado, es probable que México mantenga continuidad de la política exterior y se conserven las consultas en política energética en el marco del acuerdo del T-MEC. Sin embargo, con un ganador distinto en cada cámara resulta factible que las tensiones se queden al interior y que las relaciones bilaterales entre México y Estados Unidos no sufran cambios drásticos.