Xóchitl Gálvez Va

By Marcelo Fabián…, 29 Junio, 2023 | Cumple criterios The Trust Project

Espada de Dos Manos
Columna de Opinión
Autor: Marcelo Fabián Monges
Escritor y periodista
Jueves 29 de junio de 2023

Disparada como un rayo, la senadora Xóchitl Gálvez puso primera y salió en punta en la campaña para ser la candidata a la presidencia por parte de la oposición, que al igual que Morena, no le llamarán campaña presidencial.

Pero lo cierto es que Xóchitl Gálvez le sacó como vuelta y media a todos los demás aspirantes presidenciales de la oposición en un solo día. Algo que cualquiera podría decir, es algo fenomenal.

Mientras los demás aspirantes parecen dormir el sueño de los justos, Xóchitl Gálvez, este martes 27 de junio, primer día de largada para los aspirantes a la presidencia de la oposición, al menos en la práctica, a la hora que la entrevistó la periodista Azucena Uresti ya había realizado 29 entrevistas en distintos medios de comunicación.

También había logrado una enorme cantidad de menciones en redes sociales, superando incluso largamente a Claudia Sheinbaum Pardo, la principal corcholata de Morena, o el principal prospecto como candidata a la presidencia de López Obrador.

Pero ¿Hacia dónde va Xóchitl Gálvez?
Parece que estamos ante un fenómeno magistral. Xóchitl Gálvez en punta, en un solo día. Esto se puede explicar por varias razones. La primera, por la forma rauda en la que arrancó la senadora del PAN, con una postura como que se decidió a último momento, pero se lanzó con mucho entusiasmo. Pero también por la avidez y la necesidad de una sociedad y de los medios de comunicación, la primera de tener y los segundos de mostrar, una alternativa viable de la oposición, un “salvador de México” alguien que venga a arreglar el desastre de este gobierno en los principales problemas del país, así como la destrucción de las instituciones.

Pero en esta carrera a toda velocidad de Xóchitl Gálvez, donde parece darle ya casi dos vueltas a los demás corredores, o candidatos, no parece haber mucha gente que se haya parado a analizar ¿hacia dónde va Xóchitl Gálvez?

En distintas entrevistas, en su “primer día formal de campaña” Xóchitl Gálvez dio algunas definiciones muy concretas, que dejaron claro hacia dónde va y de qué forma.

En una de esas entrevistas, el periodista Ciro Gómez Leyva le preguntó a Xóchitl Gálvez por qué quería ser presidenta de México, la senadora respondió que: “por amor a México”. Si ese es el argumento, unos 120 millones de mexicanos también podrían ser candidatos la presidencia de la República.

En otras entrevistas Xóchilt Gálvez ha dicho que si ganara la presidencia le gustaría seguir viviendo en su casa, e ir en bicicleta a su despacho en la presidencia.

Esto nos lleva obligatoriamente a tener presente cómo llegó a la presidencia López Obrador, trasladándose en un tsuru, un auto económico, modesto, y el discurso de la austeridad. El mismo López Obrador que terminó viviendo en un Palacio Virreinal y que hace mucho tiempo dejó de trasladarse en tsuru. Es decir, un engaño populista, y un discurso que es una completa mentira, con el que aún hoy sigue atacando por ejemplo a los organismos autónomos o a la Suprema Corte.

La pregunta que tenemos que hacernos acá como sociedad es ¿si de esta experiencia de López Obrador hemos aprendido algo?, y ¿si de verdad queremos reemplazar un populismo guinda como el de Morena por uno azul de Xóchitl Gálvez? ¿De verdad la alternativa superadora al modelo de López Obrador, cuya imagen vendió al pueblo de México usando un tsuru, va a ser una presidenta que llegue a su despacho en bicicleta?

En realidad, no estamos en Holanda o en Suiza, donde estas cosas pueden ser posible, incluso porque las cárceles están vacías y no hay delincuentes. En el México de hoy, plantear eso es poco serio. Una presidenta que se traslade en bicicleta en primer lugar perdería mucho tiempo, que se necesita para resolver los principales problemas del país. En segundo lugar, constituiría un problema grande de seguridad nacional.

A la tarde del martes 27 de junio, la periodista Azucena Uresti entrevistó a Xóchitl Gálvez. Durante la entrevista le preguntó ¿cuáles eran sus pecados? Xóchitl Gálvez respondió: “la perversión y la lujuria”. Si lo mismo hubiera respondido Maribel Guardia o Ninel Conde seguramente sería comprensible. Pero en Xóchitl Gálvez es ridículo por razones obvias. Además, esto se da en un contexto en donde Xóchitl Gálvez está hablando de sus banderas de campaña.

Déjeme contarle a usted lector, o lectora, que un perverso como presidente ya lo tenemos ahí viviendo en Palacio Nacional. No necesitamos otro u otra. Por el contrario, necesitamos gente sana, intelectualmente, emocionalmente y espiritualmente, para poder conducir el país, sin envidias, sin odios, sin rencores, sin improvisaciones.

En una entrevista que le hizo Ciro Gómez Leyva a Xóchitl Gálvez el día 14 de junio de este año[1], el periodista le preguntó si estaba estudiando la posibilidad de ser candidata a la presidencia, a lo que Xóchitl Gálvez respondió textualmente así: “Sí, estoy estudiando esa posibilidad, con ética, con honestidad, acá también te dije, que no sé qué hacer con el país. Hice ese comentario, y me empezaron a decir, a ver, te podemos ayudar en esto, en esto otro….”.

¿De verdad la candidata elegida por la alianza opositora podría ser una mujer que declara que “no sabe qué hacer con el país”, mientras se lanza por la candidatura a la presidencia?

En la entrevista que le hace Jorge Ramos a Xóchitl Gálvez el domingo 25 en Al Punto con Jorge Ramos, en el minuto 4:38 el periodista le dice que en el gobierno de López Obrador han asesinado a más de 146 mil mexicanos, ¿Cómo solucionaría usted el problema de la violencia particularmente con los carteles? Xóchitl Gálvez responde: “Pues justo de las cosas que yo he dicho, para pensar si quiero ser o no candidata es ese tema. Realmente hoy no tengo una propuesta de seguridad pública clara”.

Entonces después no habría derecho a quejarse.

Esto querría decir que como sociedad no hemos aprendido nada de lo que nos ha sucedido con López Obrador, quien dijo, por ejemplo: “al diablo con sus instituciones” desde mucho antes de llegar a la presidencia y una vez en el poder se ha dedicado a tratar de demoler las principales instituciones del país, si representan un freno para sus caprichos, ocurrencias y ambiciones. No estoy comparando a Xóchilt Gálvez con López Obrador. Lo que estoy diciendo es que con López Obrador hubo muchas señales de lo que en realidad representaba y de lo que era capaz de hacer, y la sociedad mexicana no supo advertir, escuchar y tomarse en serio estas señales. Con Xóchilt Gálvez puede pasar exactamente lo mismo.

Creo que más allá de que un candidato sea simpático, arranque con entusiasmo, etc., hay que sabe valorar y pensar de manera seria cuáles son sus ideas, qué es lo que propone, y qué haría en realidad al llegar al poder. En esto, Xóchilt Gálvez si bien arrancó muy fuerte, también ha patinado mucho y se ha ido de pista muy rápido.

Es de esperar que los demás aspirantes de la Alianza para ser candidatos a la presidencia de la República, tengan propuestas más serias que Xóchitl Gálvez, que sí muestren cómo resolverían los principales problemas del país, y puedan convencer al electorado para llevar a México por un mejor rumbo a partir del 2024.

Xóchitl Gálvez, la vendedora de gelatinas, según su relato, o el video donde Xóchitl Gálvez sale amasando y cocinando tortillas en una construcción muy humilde, o la Xóchitl Gálvez a la que su abuela murió a los 34 años en la pobreza, según cuenta ella misma en la entrevista que le hizo Jorge Ramos el lunes 26 de junio, son todos elementos muy bien elegidos para el marketing, pero hay que saber mirar si cosas como esas en realidad alcanzan para ser una buena presidenta, para saber conducir un país, y para resolver los principales problemas de México.

Porque también hay que saber reconocer que vendedores de gelatinas hay muchos en México, así como gente que a la que se le muere un familiar en la pobreza, y estas cosas por sí solas no necesariamente van a desarrollar en todos los que se dedican a eso, o les pasan estas cosas, las cualidades necesarias para poder conducir un país como México y llevarlo a un buen destino.

Desde que se anunció el “método” de la Alianza Opositora ya han tenido demasiados tropiezos y cosas poco claras. Estas formas que han elegido quienes conducen la Alianza, han logrado en muy pocos días perder a una de las principales contendientes a la presidencia de la república como Lilly Téllez, a la cual no le respondieron sus 50 preguntas aclaratorias sobre el método, lo cual muestra una falta de oficio político bastante increíble.

Esperemos que en lo sucesivo quienes articulan la Alianza, sean más serios, más respetuosos con todos los aspirantes a la candidatura a la presidencia, y también les exijan ideas más claras que las que ha expuesto hasta ahora Xóchitl, quien en la enorme cantidad de entrevistas que ha dado, en dos días no se ha sabido diferenciar en nada del gobierno de López Obrador.